lunes, 29 de marzo de 2010

En busca del tiempo perdido


"En cuanto reconocí el sabor del pedazo de magdalena mojado en tila que mi tía me daba (aunque todavía no había descubierto y tardaría mucho en averiguar el por qué ese recuerdo me daba tanta dicha), la vieja casa gris con fachada a la calle, donde estaba su cuarto, vino como una decoración de teatro a ajustarse al pabelloncito del jardín que detrás de la fábrica principal se había construido para mis padres, y en donde estaba ese truncado lienzo de casa que yo únicamente recordaba hasta entonces; y con la casa vino el pueblo, desde la hora matinal hasta la vespertina y en todo tiempo, la plaza, adonde me mandaban antes de almorzar, y las calles por donde iba a hacer recados, y los caminos que seguíamos cuando hacía buen tiempo. Y como ese entretenimiento de los japoneses que meten en un cacharro de porcelana pedacitos de papel, al parecer, informes, que en cuanto se mojan empiezan a estirarse, a tomar forma, a colorearse y a distinguirse, convirtiéndose en flores, en casas, en personajes consistentes y congnoscibles, así ahora todas las flores de nuestro jardín y las del parque del señor Swann y las ninfeas del Vivonne y las buenas gentes del pueblo y sus viviendas chiquitas y la iglesia y Combray entero y sus alrededores, todo eso, pueblo y jardines, que va tomando forma y consistencia, sale de mi taza de te."

Uno de los fragmentos más famosos de la literatura, un fragmento de "En busca del tiempo perdido" de Proust. Asignatura pendiente desde hace años. Aunque no lo reconozca, es un libro al que quizá le tengo miedo. Me da que puede ser insufrible. Para disfrutarlo hay que estar entrenado y motivado. Clemente ya usó el título como punto de partida para una de sus "clementianas", yo utilizo este fragmento como pie para otra perspectiva. El autor constata cómo el sabor de la magdalena le transporta en un viaje en el tiempo a otro espacio.

Andaba yo esta tarde con gestiones de trabajo por el pueblo cuando vi un cartel sobre una exposición: "Mitos en blanco y negro" en la Casa de la Cultura. "Mitos" y "blanco y negro" eran suficiente estímulo para hacer una visita. Cuando llegué, me dijeron que se inaugura mañana. Ya salía cuando advertí el cartel de la biblioteca; no sé muy bien la razón pero me tentó subir y para allá me encaminé . Hacía muchos años que no entraba. Cuando estudiaba en el instituto, iba todas las semanas.

Me acerqué al más propio estilo turista, despacio y observando; le dije a la bibliotecaria que hacía siglos que no aparecía por allí y penetré en la sala mirando todo con una extraña sensación de nostalgia y gozo -algo parecido a cuando vi en Cullera la acequia en la que casi me ahogo con cinco años, episodio que algún día os relataré-. Por supuesto muchas cosas habían cambiado: ahora hay una sala infantil, "wi-fi" gratuito, ya no existen las diminutas e incómodas mesas y sillas, prestan películas y discos pero el olor es el mismo.

Ese olor y la somera inspección que lleve a cabo a las estanterías cual Atalanta con pelo veinte años atrás, fue como un verdadero paseo en el tiempo. Hay libros nuevos, pero volví a sentir entre mis manos algunos volúmenes que ya llamaron mi atención tanto tiempo ha. Volver a hojear esas mismas páginas a estas alturas de mi vida se me antojó extraño. Constaté que millones de aquellas mismas palabras me siguen tendiendo la mano, me siguen invitando al baile porque aún no han recibido mi visita. Advierto con júbilo de nuevo la tentadora oferta. Tal vez nos engañamos, quizá no cambiemos tanto si al fin y al cabo me siguen atrayendo los mismos temas.

Y como en el fragmento de Proust, ese olor y ese ambiente provocaron la aparición de personajes olvidados como Jacinto, el extraño compañero que, sin relacionarse con nadie, pasaba su vida allí dentro, copiando fragmentos de enciclopedias y varias chicas de las que creía estar perdidamente enamorado y risas incontenibles mientras preparábamos chapuceros trabajos de clase y angustias, agobios e inseguridades motivadas por tus relaciones personales, por tus obligaciones académicas, por todos los cambios que estabas sufriendo y reprochables prácticas como hurtos o recortes de revistas con entrevistas a Lou Reed o reportajes sobre la Batalla de Stalingrado y...

Seguro que dentro de veinte años me gustaría estar precisamente aquí, justo en el momento en el que ahora mismo me encuentro, con mis problemas y con mis oportunidades. Tal vez entonces un olor o una visita me devuelva por unos instantes al 29 de Marzo de 2010.

Ni que decir tiene que aunque tengo una ingente lista de espera de lectura en casa, me volví a hacer socio y me dieron otro carnet. Lo cierto es que... ¡aún conservaban mis datos!

Como canción, tiro fijo era elegir el "Glory Days" del "Born in the USA", porque casa como un guante con el recuerdo de otros tiempos pero elijo otra del mismo disco con temática afín, una de las canciones que quizá menos llamó la atención del multimillonario e irregular disco, "Bobby Jean". Un sencillo y entrañable canto a la amistad guiado por el piano de Roy Bittan hasta una despedida sin amargura. Es la vida, vamos perdiendo y ganando cosas y personas que dejarán su pequeña o gran huella. Aunque esta gira no es de las que más aprecio porque a veces me da la impresión de que Bruce maltrata sus propias canciones, el solo final de saxofón de "Big Man" Clemons, ahora que ya no se estilan esas cosas, es impagable.


Otra gran canción de Cooper que me grabó Joserra en su imprescindible "Recopilación 2009" y que trata el paso del tiempo; la añoranza de la juventud de una forma poética y certera. El vídeo es un paseo de Alejandro -"Viviendo en la era pop"- Díez por Londres ¿Acaso puede haber alguien más "british" que el "Flechazo" leonés? Dedicada a "somos, somos los mods" Joserra y Mildo.



"Hyde Park"

Hubo una vez en que yo fui feliz
en que mi futuro era una página blanca,
un mundo nuevo brillaba ante mí
y yo aprovechaba cada oportunidad.
Con la semana llegando a su fin,
yo me paseaba entre tumbonas de rayas,
la gente seria me hacía reir
y si me cansaba me paraba a escuchar
los sonidos del silencio,
la llegada del invierno, sí...
Es imposible que pueda olvidar
el cielo en los domingos de Hyde Park.
Yo descubrí lo que era ser feliz

viendo las sonrisas de las chicas del parque,
se me olvidaba mirar el reloj,
nunca es tarde si la tarde te habla de amor.
Los olores en el metro

vuelan desde mi recuerdo, sí...
Lo que yo daría por estar
tumbado en la hierba de Hyde Park.
Hubo una vez en que yo fui feliz
con una conciencia tan vacía de cargas
como el bolsillo de aquel traje gris
que sólo guardaba un viejo ticket de bus.
Hubo una vez en que yo fui feliz,
hubo una vez en que yo fui feliz,
qué deprisa se ha pasado mi juventud.

jueves, 25 de marzo de 2010

Demolición controlada del mundo real (Versión 2.0)


Hacía más de un año que no preparaba una recopilación. Como decía Rob Flemming, hacer una buena cinta recopilatoria es más complicado de lo que puedes pensar, debes tener en cuenta a quién te diriges y qué quieres contar. Hay un montón de reglas.
Ya tenía una "Demolición controlada del mundo real". Al partir de los mismos postulados, este disco será una versión mejorada.
Todas son "modernas" canciones tranquilas o de pop luminoso. No hay nada realmente viejo o "trallero".
Si hay una nota en común entre las canciones, es que todas, en uno u otro momento, me emocionaron. Algunas de ellas me llevaron muy lejos. En "Casi Famosos" utilizan la visión del rock como medio para escapar de la realidad. Bien, durante esos mágicos tres minutos y medio...¿Por qué no?

Si alguien quiere la compilación, que me pase la dirección a abelatalanta@gmail.com. Aunque no lo conozca o sea de la mayoría silenciosa, no importa.
Al loro, comentario sobre las canciones. ¿Será Atalanta capaz de ser breve?

1. QUIQUE GONZÁLEZ: "Kamikazes Enamorados". Una de mis canciones. Cientos de veces la he escuchado.
2. GRAND ARCHIVES: "Torn Blue Foam Couch". Un canto que me enamoró desde el principio.
3. TEDDY THOMPSON: "The Things I do". Folk británico "poperizado".
4. LUCINDA WILLIAMS: "Blue". Como ya dije, mece y raspa.
5. LAMBCHOP: "Up with People". De las favoritas de Joserra. El neo country se queda estrecho y se abre al soul.
6. DAMIEN RICE: "The Blower´s Daughter". ¿Por qué una canción que parece tan frágil e inacabada se torna tan devastadora?
7. CAMERA OBSCURA: "Number One Son". Los alumnos aventajados de Belle & Sebastian adoran todo lo que respire pop clásico.
8. THE SMITHS: "The Boy with his Thorn in his Side". Uno de mis grupos, uno de sus clásicos.
9. BELLE & SEBASTIAN. "The Boy with the Arab Strap". Después de hacer la versión de la anterior, en sus conciertos seguían con este otro chico. Pop, más pop.
10. SIGUR RÓS: "Eljotavik". Ya he hablado de ellos varias veces. Escojo una perfecta miniatura de su último disco. Rock progresivo con coartada sentimental.
11. IVÁN FERREIRO: "Turnedo". No me cansaré de reivindicarla como de lo mejor del pop español.
12. PINK FLOYD: "Wish you were here" ¿Por qué esta obviedad? Porque cuando la escuché con 30 horas de machaque en UTMB, me pareció la canción mas hermosa de la historia.
13. DEATH CAB FOR CUTIE: "Tiny Vessels". Otra de mis debilidades, otro de mis discos favoritos.
14. RADIOHEAD: "Fake Plastic Trees". Antes de ser grandes de verdad, ya hacían grandes canciones. En directo puedes llegar a levitar.
15. CRAIG ARMSTRONG con EVAN DANDO: "Wake Up in New York". El señor de las cuerdas extrae petróleo de algo insignificante.
16. BRIGHT EYES: "The First Day of my Life". Una sencilla y gran "menina".
17. VETUSTA MORLA: "Copenhage". Aunque debido a su éxito, ya no está bien visto reivindicarlos, yo los considero autores de un gran disco.
18. EVERYTHING BUT THE GIRL: "My Head is my only House unless it Rains". Antes de que a Ben Watt le diera por los bits, Tracey Horn cantaba delicias como ésta.
19. HOOVERPHONIC: "Eden". Aunque ha envejecido mal, me trae buenos recuerdos.
20. BETH ORTON: "Stolen Car". Cuando no prestaba su voz a los delirios electrónicos de los "hermanos químicos", Beth era capaz de facturar clásicos como éste.
21. THE VERVE: "Drugs Don´t Work". Richard Ashcroft se gusta. Ay, el desamor.
22. LA BUENA VIDA: "Tormenta en la mañana de la vida" A veces moñas e inofensivos, a veces dueños de hermosas y tristes canciones.
23. PORTISHEAD: "Roads". La puse hace poco. Muy intensa.
24. MOJAVE 3: "Excuses for Travellers". Ingleses fascinados por desiertos y "slides".
25. JEFF BUCKLEY: "Hallelujah". Ya tratada. Entre las diez mejores canciones de la historia, más allá del original.
26. VAN MORRISON: "High Summer". No fui muy atrás, no hace falta. En estudio, en directo, el de Belfast siempre cumple.
27. WILCO: "Via Chicago". Podía haber escogido muchas canciones. Me decanté por una antigua por esa voz, esa desgana, esa cadencia tan agradable de Jeff Tweedy.
28. RON SEXMITH: "Poor Helpless Dreams". Tiramos de pop, tiramos de folk para cantar verdad. ¿Por qué a veces todo lo hacemos tan complicado?
29. JOHNNY CASH: "Hurt". Utilizando a Nine Inch Nails, Cash escribe su escalofriante testamento.
30. JOSH ROUSE: "My Love has Gone". Antes de enamorarse de una valenciana y cantar en "español" lo buena que está la paella, Josh escribía joyas como ésta.
31. THE CHURCH: "Under the Milky Way Tonight". Otro clásico del rock a reivindicar de una de tantas grandes bandas australianas.
32. THE POSIES: "You are the Beautiful One". Pop perfecto que en un mundo perfecto, debería brillar en las radiofórmula a todas horas.
33. BETH GIBBONS & RUSTIN MAN: "Mysteries". La aventura en solitario de Beth Gibbons no podía ser más hermosa y turbadora.
34. DOVES: "Here It Comes". Bendito día en que se les quemó el estudio con todas las sesiones de grabación. Decidieron cambiar de estilo y acertaron.
35. LOW: "La La La Song". Los mormones cantan himnos de alto voltaje.
36. THE SMITHS: "Girlfriend in a Coma". Una curiosa miniatura.
37. JAMES: "Sometimes". Tim Booth arrastra esa tendencia mesiánica de los ochenta pero cuando quieren, pueden hacer pop de muchos kilates. Una recopilación suya es imprescindible.
38. TORI AMOS: "I don´t Like Mondays". A esta chica sí que no le gustaban los lunes. Utiliza la canción de los Boomtown Rats para una versión ralentizada, asfixiante y tristona.
39. GLASVEGAS. "It´s my Own Cheating Heart that Makes Me Cry". Su único disco no era redondo pero dentro de ese magma de guitarras, hay razones para la esperanza.
40. DAMIEN RICE. "Cannonball". Como en su día gustó mucho, repite.
41. BON IVER: "For Emma". Encerrado en una cabaña en el monte después de una ruptura amorosa y una enfermedad, Justin Vernon graba un sencillo y tremendo disco que crece a cada escucha. (Dejo el vídeo de otra enorme)
42. SUFJAN STEVENS: "Chicago". Un tipo curioso con múltiples influencias e instrumentos y sobre todo con grandes canciones.
43. GORAN BREGOVIC: "Ederlezi". Desde los Balcanes...¡Daimiel! Esta extraña canción -que supongo tradicional- está en mi recopilación pop porque es una de mis composiciones favoritas.
44. PIRATAS: "M". Otra grande de Iván.
45. THE SOUNDTRACK OF OUR LIVES: "Nevermore". Otra de pop perfecto desde Suecia.
46. NICK CAVE & THE BAD SEEDS: "The Ship Song". Uno de mis compositores de cabecera; hay decenas de canciones que me gustan más pero escojo ésta de su disco portugués porque es fácil y su estribillo es adhesivo.
47. SIX BY SEVEN: "For You". Como Doves, otro hermano pobre del Brit Pop. Merecieron más.
48. EELS: " 3 Speed". Mr. E es un compositor fácil que da la impresión de hacer lo que quiere. Puede ser accesible, puede sonar "alternativo". Puede ser depresivo -razones tuvo, el pobre- o el alma de la fiesta.
49. RUFUS WAINWRIGHT: "Going to a Town". Ampuloso, barroco, perfecto, hermoso.
50. THE NATIONAL: "All the Wine". Para cerrar una de las canciones que me tiene últimamente enganchado.

Además he preparado un recopilación de Love of Lesbian, quedándome con lo mejor de sus tres últimos discos, prescindiendo de su vena payasa.
Ya estoy lanzado así que este fin de semana diseñaré unos discos muy diferentes para las noches del Manolín, de los que ya se dará noticia.






martes, 23 de marzo de 2010

II Verracada Nui!!, 10 de Abril.


Pues eso, ya está dicho todo. El 10 de Abril, la fecha de la Verracada Nui!! 2010. Para los que no conozcáis esta prestigiosa prueba, el enlace lo explica bien clarito todo.

Por lesión, en 2009 la hice en bici. Este año toca a pata. En principio salgo del verraco mirobrigense a las siete de la mañana, así que si alguno quiere acompañarme, ya sabe. Los ciclistas andan mas desahogados. Supongo que la partida será entre nueve y diez de la mañana desde el puente romano de Salamanca.

Ya sabéis que después hay cena de verraco y posterior
celebración jaramuga en los que a los "extranjeros" se les guiará por la clásica ronda de nuestros años mozos de carrera, es decir por los locales más arrastraos de nuestra hermosa ciudad como "Bolero" o "Pani" (ni que decir tiene, que los de mejor música).
Ya sabéis que si lo necesitáis, contad con alojamiento.

Para una prueba curiosa, una banda curiosa, Kity, Daisy & Lewis. Tres jovencitos que comenzaron en esto de la música con 11, 14 y 16 años respectivamente. Por influencia de los progenitores, su música está anclada en unos añejos cincuenta-sesenta: rockabilly, blues, R&B, gospel, hillbilly, country&western, ... Graban en estudio casero con instrumentos y en equipos de aquella época. Los medios les están prestando atención porque una familia retro se puede vender muy bien en tiempos en que el continuo revival está tan de moda. Lo bueno es que la música -por ahora muchas versiones- suena bien y su actitud es real. En el Ruta de este mes, a Lewis le preguntan si tiene Ipod y responde: "¿Qué..?" (equivalente a un "¡Mandeee!). Veremos cómo evolucionan. Escuchad la canción, se te van los pies. Ésta hay que grabarla para el Manolo. Menos Lady suputamadre hiperproducida y más música real.

Ale, anímense a rockandrolear en la Verracada Nui!!......NUI!! ¡¡Consigue tu verraquín!!


domingo, 21 de marzo de 2010

Delibes y el subbuteo


Dejé aparacada la entrada dedicada a Delibes. Cuando me enteré el viernes pasado de su muerte, ya marchaba a Madrid y no me dio tiempo a escribir. Aquella mañana, al escuchar la noticia por la radio, me emocioné. Creo que es la primera vez que me ocurre con alguien famoso, con alguien que no conozco. ¿Por qué?

De todos los ilustres y "famosos" con que nos bombardean a diario los medios, las personas que realmente valoro o de alguna forma venero, son los creadores y dentro de ellos los escritores. Todos los que consiguen moldear con genio y maestría la, para mí, creación humana más admirable y perfecta, la lengua. Esa capacidad que tiene el hombre para aprehender un concepto, una sensación, una situación mediante una serie de signos que se fueron ajustanto más y más a lo que se pretendía describir o expresar. Sistemas extremadamente complejos con los que algunos autores te pueden llevar muy lejos. Unos cuantos, muchos o pocos, según se mire, me han ayudado a conocerme mejor, a elegir caminos, a ser como soy. Y lo maravilloso es que ese proceso es infinito, nunca terminarás de buscar y de sorprenderte.
De Delibes leí varios libros. Me parecieron buenos, me gustaron pero no puedo hablar de ellos con solvencia porque la mayoría pasaron por mis manos hace mucho tiempo, cuando aún no estaba formado. El que leí más recientemente fue "El Hereje". Apuntándose al género de moda y partiendo de un episodio histórico, novela con eficacia y mantiene el interés.

Sin embargo, con Delibes mantengo una singular y ficitia relación espiritual, basada en los recuerdos de mi infancia y adolescencia. Delibes me enseño a leer y por ello no puedo estarle más agradecido. No recuerdo exactamente cuál es el primer libro que leí en mi vida pero "El Príncipe Destronado" bien podía serlo.
1981-1982. Entre ruedo de sables, España adquiría su mayoría de edad democrática, se aprestaba a su primer gobierno socialista y al Mundial de Fútbol del Naranjito.

Con once, doce años los amigos organizamos un campeonato de subbuteo. Como decía el anuncio, si sabes qué es el subbuteo, deberías empezar a cuidarte. Pequeños jugadores de fútbol que descansaban sobre medias esferas en un campo de tela que nos planchaban nuestras madres y que se impulsaban con el dedo cual chapas y canicas. Las piezas venían con el cola cao y era complicado hacerse con dos equipos completos... porque había que tomar muchos "colacaos" con galletas. Recuerdo que había cuatro selecciones: Brasil, Argentina, Alemania e Italia.


Nosotros reunimos dos equipos mezcla de todos y organizamos un campeonato. En casa de Ángel pasábamos muchas horas jugando; allí me dio por revisar los libros que tenía su hermano en los estantes y un día decidí llevarme "El Príncipe Destronado". Desde muy dagalín leía muchos cuentos. Recuerdo que incluso una tía que estaba con nosotros en Valencia, siempre que me venía a ver, me traía alguno nuevo. Todavía tengo una cartera con todos. Después ya pasé muchas horas leyendo tebeos de "Jabato", "Mortadelo", "Astérix", "El Guerrero del Antifaz".... pero un
libro enterito, sin "santos", se antojaba largo y rollo. Al final no fue para tanto, se hizo bastante ameno y corto. Recuerdo episodios concretos del libro, me gustó pero no me entusiasmó, la verdad.
Después leí otro de Delibes, "El Camino". Sí, este sí me gustó mucho. Las andanzas de Daniel el Mochuelo, Germán el Tiñoso y el tercer amigo -me niego a usar google, espero que un día vuelva a mi memoria...¿podía ser Roque?-. Aunque entonces no fuera consciente, ahí sí que empezó algo nuevo y grande en mi vida, de pronto aparecieron un montón de horas de aventuras, conocimientos y entretenimiento. El pasatiempo más barato y accesible. Tal vez por eso me emocioné ese viernes por la mañana cuando me enteré de la muerte del escritor.

Años después, todavía de adolescente, seguí con "Las Ratas", que no recuerdo muy bien,"Los Santos Inocentes", tan buena la película como el libro, "Cinco horas con Mario" que con esa edad no pude entender aunque me quedé alucinado con que todo un libraco fuese el monólogo de una viuda ante el ataud de su marido fallecido.
Tras ello, me pasé un par de años leyendo novelas de Sven Hassel y ensayos sobre la Segunda Guerra Mundial pero ésa es otra historia.

Mis abuelos eran guardianes de fincas y te cuenta historias de miseria no muy alejadas de las de "Los Santos Inocentes" Mi abuela Claudina está en el hospital, anda la mujer ahí, ahí, con noventa y cinco años, peleando la vida. Se ha roto la cadera y anteayer la operaron. No es que tenga ninguna enfermedad en concreto. Cuando se muera, se morirá de vieja, sin más. Aparte de la difteria que sufrió de niña y de la que te habla como lo peor que ha pasado en la vida, no la recuerdo en el hospital. Hace pocos años la operaron de cataratas y ahora lee mejor que yo. Como mi bisabuela y por lo que cuentan, mi tatarabuela, son de la estirpe de mujeres castellanas, menudas y duras, nervios en tensión, hechas a soportarlo todo. Estoy seguro que el coraje que le echo a las carreras de ultrafondo cuando el tema se tuerce, me viene de su sangre. Aunque el médico nos pintó un panorama bastante negro, ayer se encontraba bastante bien y no hay mejor señal que su reacción al enterarse de que su hermana estaba bien, cuando respondió, echándose a reir con el desparpajo que la caracteriza: "Sí, sí, bien.... ¡¡DE COJONES estamos las dos!!". Me da que el más allá va a tener que esperar.

Para una entrada dedicada a un grande, música grande. Ya sabéis que ahora estoy enganchado a Lucinda Williams. Como el amor al que dedica "Essence", su música, su voz mece y raspa a la vez. Una canto de amor y un lamento de una intensidad asfixiante. Que las disfrutéis.




"I envy the wind"

I envy the wind
that whispers in your ear
that howls through the winter
that freezes your fingers
that moves through your hair
and cracks your lips
that chills your to the bone
I envy the wind

I envy the rain
that falls on your face
that wets your eyelashes
amd dampens your skin
and touches your tongue
and soaks through your shirt
and drips down your back
I envy the rain

I envy the sun
than brightens your summer
that warms your body
and holds you in her heat
that makes your days longer
and makes you hot
and makes you sweat
I envy the sun



"Blue"

Go find a jukebox
And see what a quarter will do
I don´t wanna talk
I just wanna go back to blue

Feeds me when I´m hungry
And quenches my thirst
Loves me when I´m lonely
And thinks of me first

Blue is the color of night
When the red sun disappears from the sky

Raven feathers shiny and black
A touch of blue glistening down her back

We don´t talk about heaven
And we don´t talk about hell
We´ve come to depend on
One other so damn well

So go to confession
Whatever gets you through
You can count your blessings
I-ll just count on blue

miércoles, 17 de marzo de 2010

De "cultureta" por el foro

"El Columpio " (Renoir)


"Un taller en Batignolles" (Latour) (Entre otros, Manet, Monet, Renoir, Zola)




"La Evasión de Rochefort" (Manet)


"Regatas en Argenteuil" (Renoir)



"La madre del artista" (Whistler)


De "cultureta" por el foro con unas agujetas de pánico. Me gusta Madrid. Supongo que a la mayoría de madrileños os chirriará esta afirmación. Claro, yo sólo voy un fin de semana, no paro y hasta el metro me parece exótico. Se me alcanzan inabarcables las posibilidades que te ofrece esta ciudad monstruo. Iba a ver la exposición de Manet en el Thyssen pero Plato me dijo que la Fundación Mapfhre tenía otra con fondos del Museo Dorsay, un lugar que si vais a París no os debéis perder, es el museo de los impresionistas y similares. Me tocaron "sólo" dos horas de espera gracias a que Guillermo me avisó de que me presentara con tiempo.
Pensamos que el Impresionismo -un día hablaré de él-, supuso una ruptura total con la pintura clásica. Sin embargo no fue así, la exposición está enfocada desde la perspectiva de la convivencia de los nuevos artistas rompedores con otras más academicistas. Manet, considerado como el padre espiritual de todos los impresionistas y con gran éxito en vida, conjuga el apego a la tradición con su pasión por el nuevo lenguaje. Hay incluso un cuadro de Latour en que aparecen juntos, en el taller del maestro, varios de los protagonistas del nuevo movimiento, posando para la posteridad. Los que estéis por Madrid y os interese el tema, no os lo perdáis. Una pequeña exposición muy didáctica con algunas obras maestras.



Por la tarde tocaba música. Radio 3 organizaba varios conciertos en La Casa Encendida. Esta vez una hora de cola.

Cohete. No me dijeron nada, no sé muy bien de què van o quizá es que tocaron a la hora de la siesta.
La Bienquerida. Un acústico de Ana y su pareja-productor David "Beef" Rodríguez malísimo. Su disco, elegido mejor del año por algunas publicaciones, me parece sobrevalorado. Su concierto patético. Mal augurio fue romper una cuerda de la guitarra nada más comenzar. Por favor, currénselo más... o un poco de gracia, o un poco de saber estar... aunque me da que ni así.
Tablas le sobran a Coque Malla. Si éste no pudiera subirse a un escenario a cantar y a contar, se nos moría. Comenzó con esta canción, "Hasta el final" en el mismo formato en que aparece en el vídeo, con Nico Nieto acompañándole a la guitarra. Enroscado en la butaca, disfruté de un buen concierto y hubo ratos en que... coño... me emocioné.





Probablemente lo mejor que le haya ocurrido a Coque en los últimos tiempos es que una multinacional como Ikea escogiera una canción de Los Ronaldos para sus anuncios. Me alegro. Aquí la dejo, una canción clásica, una buena letra y un vídeo eficaz. La edad hace que tengamos cariño a Los Ronaldos, que se nos salte la lagrimilla cuando los escuchamos y eso que si ahora se les ocurriera publicar algo como "Sí, Sí", Bibiana los enchironaba sin remedio (y esta vez, sin que sirva de precedente, con razón).


Otro anuncio puso a Facto de la fe y las flores azules en órbita. Esta vez fue El Corte Inglés. Como muchas otras veces, yo los conozco desde el principio. Recuerdo que "Mar, el poder del mar" me gustaba pero creía que la fórmula se les agotaría pronto. Me equivoqué, acaban de publicar el tercer disco y siguen subiendo sin parar. Ya se quedaron sin el "Facto", ahora sólo son Elena y Oscar, De la fe y las flores azules.
No puedo más que reconocer que me sorprendieron para bien. En directo son mucho mejores que en disco. Me esperaba otros indies medio "asustaos", medio "paraos" jugando a hacer como que rapean. Al fin y al cabo Elena viene de la oscuridad de los Élena. Sin embargo, la energía que son capaces de incorporar a sus ñoñas composiciones es tremenda. La menudita y preciosa Elena juega a ser pícara y mala y aunque no te puede convencer, te hace sonreir; Oscar hace las veces de gran bailarín y eficaz maestro de ceremonias. La química es perfecta. Casi todos los temas eran nuevos y aún así, todos fueron recibidos con entusiasmo.
¿Que me pasa con De la fe? A ver si me explico. Cuando era chaval, un amiguete al que le gustaba contar chistes, a veces comenzaba diciendo: "Éste, de puro malo, es el mejor". Bueno, pues algo así me pasa a mí con esta banda. Alguna canción, algún verso me parece tan sonrojante, tan de vergüenza ajena que digo... joder, hay que tenerlos bien puestos para publicar semejante basura. Sin embargo, al rato, me sorprendo cantando en la ducha: "¡¡Lucha niña guapa, hazlo niña buena!!" Ya lo he dicho alguna vez, la edad te libera de prejuicios. Pero para que me entendáis mejor: el sábado me compré "Essence" de Lucinda Williams y eso es tan jodidamente bueno que te preguntas cómo se le puede llamar música a ambas cosas. Bueno, lo dicho, si podéis, no os perdáis el directo porque os vais a divertir.
¡¡ROCK AND ROLL!!




martes, 16 de marzo de 2010

Entre afrancesados

Desde que de dagal conocí el término y sus connotaciones, siempre simpatícé con los afrancesados. Personas que comprendían los males de una tierra rancia y oscura, mezquina y ceporra, de sotana y muleta, que buscaban que el país avanzara, se abriera a otras ideas, a esa nueva y a veces tramposa luz de la razón que ellos entendían no podía traer más que bien a nuestra siniestra España. Entiendo lo difícil que debió ser para unos cuantos lúcidos personajes, comprobar que los derechos y la ilustración cruzaban los pirineos no en libros sino a los lomos de caballos del ejército de un emperador egomaníaco, hambriento de gloria que en poco se diferenciaba de todos los grandes tiranos de la historia. Triste destino enfrentarte a la verdad y a la incomprensión de un pueblo que irracional y estúpidamente sólo anhelaba la vuelta de nuestro gobernante más hi de puta e incompetente, "el deseado" Fernando VII, al que poco tiempo le faltó para enterrar la "La Pepa" y dedicarse a sus fechorías.


Ahora bien, nunca creí que participaría en una suerte de homenaje a una batalla de la Guerra de la Independencia en la que vencieron precisamente los franceses, se trata de la Batalla de Somosierra, la única en la península ibérica en que Napoléon ejerció el mando directo sobre las tropas. Acto heroico de la caballería polaca, su mayor éxito a lo largo de la historia. En una carga suicida, ciento veinte húsares consiguieron tomar las baterías españolas que custodiaban el puerto.

Un carga suicida es lo que nos planteó unos meses ha, Spanjaard, la Napoleonienne. ¿Y por qué no? No podía faltar un jaramugo. Allá que nos plantamos la mañana del sábado, 13 de Marzo, cual soldadesca imperial, cinco aguerridos jinetes para recorrer el camino que a Napoleón le llevó tres dias, desde el Puerto de Somosierra hasta el Cuartel de Chamartín.

Mientras mis cuatro compañeros ejercían de soldados regulares de la Grande Armée, amigos curtidos en otras batallas de semejante jaez, yo asumía el papel de mercenario polaco, ya que los conocí personalmente aquella mañana. A fe mía, peculiar forma de encuentro.

Tras inclemente invierno, esa mañana lucía el sol y un espléndido día acogía nuestra temeraria empresa. Los temibles seis grados bajo cero previstos tornaron en unos "cálidos" tres bajo cero a las siete y media de la mañana, hora de comienzo de la expedición. Y algo fundamental, una delicia de aire de espaldas, una bendición que sabíamos nos acompañaría hasta el final del trayecto.
Por la correspondencia previa, confirmado ya en el breve trayecto en coche hasta el puerto, ya sospechaba que estas gentes gustaban de extraño sentido del humor, brillante y pedestre, donde se mezcla lo culto con lo soez con magistral naturalidad, la que se adivina conseguida tras muchas horas de ejercicio. Entre tanta puya y disparate, no puedo más que decir que pocas veces habré reído más a lo largo de un día.

Comenzamos con buen humor y animados, tras las huellas de nuestro Emperador Luis Spanjaard, dando vivas a la France y entonando la Marsellesa, mientras Andrés acomete la que después tornará familiar letanía: "Shoo no estoy bien" (léase con acento argentino...vos sabés). Es lo normal, no hay problema. Al mismo tiempo, Guille se apresta a leernos unos legajos que nos relatan el desarrollo de la campaña además de la correspondencia entre Napoleón y su hermano José. Atención, dato de interés: el tatarabuelo de Guillermo tuvo un destacado papel en el levantamiento popular que originó el Guerra de la Independencia, aunque después salió trasquilado por nuestro amigo Fernando. Si hasta tiene una estación de metro dedicada... aunque es de la línea 6, de la circular.

Guishe casi no habla....la tropa acelera para hacerlo callar. Primera parada, Buitrago (Km. 20).Aquí hizo noche el Bonaparte, aquí desayunamos caliente en un bar del pueblo.

Recomenzamos la marcha con algún que otro problema de orientación por parte de Luis que soporta con entereza los escarnios de sus subordinados que ya amenezan motín. Sin embargo seguimos adelante hasta Pedrezuela donde ya, con cuarenta kilómetros en las piernas, comemos unas buenas lonchas de jamón con cerveza. Hasta ahora hemos marchado de acuerdo a lo previsto. Trote continuo excepto en las cuestas arriba donde se camina a buen paso -primer mandamiento del ultrafondista-.

Continuamos por caminos y carreteras, marchando con dignidad ya con el objetivo de San Agustín de Guadalix en el punto de mira (Km. 62), donde a Guille le espera Sofía, su esposa, en una concurrida merendola que invita a sentarse, comer plácidamente el chuletón con el que hace horas nos atormenta Guillermo y echarse al coleto un gin tonic. Resistimos la tentación. A mí hace rato que los cuadriceps me arden. No tengo hecho el cuerpo a tiradas largas y cuando comienzo a caminar o correr, veo las estrellas, pero sé que esos dolores no son de los malos. Se pasan corriendo. A la prevista baja de Guillermo se nos une la de Andrés que el anterior domingo ha corrido el Maratón de Barcelona y que aunque ha marchado tocado los últimos kms., le ha echado un coraje tremendo para continuar con el ritmo. Por los servicios prestados, no fusilamos a los desertores y seguimos adelante.
Ya sólo somos tres, Eduardo, Bonaparte y yo. Sabemos que debido algún que otro error de cálculo y alguna rectificación, nos vamos a ir a unos cuantos kilómetros más de los 92 inicialmente previstos. La tarde está estupenda. Corremos por caminos de los "100 kms. del Corricolari" a buen ritmo sin parar de charlar, hasta llegar, ya de noche, a SAn Sebastián de los Reyes y Alcobendas, donde hacemos la última parada en el coche de Eduardo para comer y cambiarnos de ropa. Hace unas horas, nos tentaba la idea de terminar nuestra aventura aquí pero en estos momentos, a cerca de diez kilómetros del final, la moral está alta y ni se plantea la rendición. Después de ya haber pasado por alguna de las urbanizaciones más "in" de Madrid, acometemos la última, la "Moraleja". Yo ya me siento justito y con dolores por todos lados pero la meta y la charla me animan.

Hace tiempo que vemos cerca las "cuatro poyas" de Madrid, referencia cercana a nuestra meta. Después de alrededor de 97 kms -la batería del Garmin feneció- y catorce horas y diez minutos, llegamos a Madrid, bien jodidos pero contentos. Olvido importante fue no llevar bandera gala para la histórica foto. En fin, para la próxima. Y me pregunto yo, ¿cómo acabando tan roto, puedes terminar tan satisfecho y tener un recuerdo tan bonito de esta extraña experiencia? Los misterios de la larga distancia.


No suelo hacer largas crónicas de carreras pero esta aventurilla lo merecía, sobre todo porque he conocido a esta enorme gente a la que seguro pronto volveré a encontrar -al loro, todos responsables padres de familia-. Por lo pronto, ya estáis contando conmigo para "la peor maratón del mundo" (42 kms. por los barrios y las zonas más "arrastraíllas" de Madrid). Bendita internet.


Ale, me voy a la cama. Para mañana, la crónica del día después o cómo ir de cultureta un domingo entero por Madrid sin que haya una parte de tu cuerpo que no te duela.

jueves, 11 de marzo de 2010

Reglas


Las diez reglas del rock and roll según Robert Forster, no el "Robert Forster" actor de los setenta de la foto de arriba que rescató Tarantino -como a tantos otros- en Jackie Brown. Me refiero al Robert Forster, cantante de un grupo de pop cristalino perfecto, de los australianos The Go Betweens.



1. Ser una estrella del rock es un trabajo de veinticuatro horas al día.
2. Todos los grandes artistas se esconden detrás de su manager.
3. El grupo con más tatuajes tiene las peores canciones. Pues aquí voy a poner un par de canciones de lo que yo llamo mi "Etapa Nórdica". En esa época escuchaba yo mucho grupo sueco y noruego: Gluciefer, Turbonegro, Hellacopters... Punkies que casi siempre acababan haciendo rock duro. Ahora los escucho menos pero de vez en cuando necesito algo de tralla -¡hey, el domingo voy a ver a Ilegales!-. La estampa de los Backyard Babies me impresionó la primera vez que los vi, chicos malos llenos de tatuajes y con indumentaria rockera de manual. De dagal esas cosas calan más. Te dan ganas de aprender a tocar el bajo al estilo punki y hacerte unos buenos "tatoos.





4. El guitarrista que cambia de instrumento cada dos canciones está presumiendo de su colección de guitarras.
5. Nada interesante ocurre en el escenario tras los primeros veinte minutos.
6. Los miembros de las grandes bandas se parecen
7. La penúltima canción del álbum es la más floja.
8. En los grandes grupos no caben integrantes haciendo discos en solitario.
9. Nunca sigas a un grupo que describa su trabajo como "oscuro".
10. La banda de tres piezas es la expresión más pura del rock and roll. Los primeros tríos que me han venido a la cabeza, dos patas negras, el reggae blanco de Police y el blues rock de Cream. Seis "musicazos", seis egos condenados a entenderse y a tirarse los trastos a la cabeza: Sting, Andy Summers, Stewart Copeland -Police- y Eric Clapton, Jack Bruce y Ginger Baker -Cream-.





Las normas que regían la actividad de un sello independiente -creo que era Amphetamine Reptile- y que llevan pegadas en mi atril desde los años ochenta:
1. Nada, absolutamente nada, es sagrado.
2. Una cruda demostración de poder jodementes en mano vale más que 47 preciosas sutilezas volando.
3. Absolutamente prohibido hacer política.
4. Hazlo tan retorcido como quieras, pero hazlo.
5. Recuerda siempre que nunca se es suficientemente extraño.


¿Os acordáis de los diez mandamientos de la Santa Madre Iglesia? Uno ya tiene una edad y no sé si a los chavales que dan "reli" les hacen aprender esas cosas. He de confesar que intenté escribirlos sin buscarlos en San Google pero los últimos tres no los recordé. El noveno es que ya es a todas luces excesivo; quizá la Iglesia deberia matizarlo. Jodido es amar a Dios sobre todas las cosas, no cometer actos impuros, no tomar el nombre de Dios en vano, pero evitar pensar en ciertas cosas.... Ahora entiendo por qué lo había olvidado.
1. Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2. No tomarás el nombre de Dios en vano.
3. Santificarás las fiestas.
4. Honrarás a tu padre y a tu madre.
5. No matarás.
6. No cometerás actos impuros.
7. No robarás.
8. No cometerás falso testimonio ni mentirás.
9. No consetirás pensamientos ni deseos impuros.
10. No codiciarás los bienes ajenos.
Algún día tengo que preparar un Decálogo Atalantiano.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Vete

Iba a publicar otra cosa, pero escuchando y leyendo varias entrevistas a Marlango debido a la publicación de su nuevo disco, recordé una versión que me enamoró hace unos años del "Vete" de Los Amaya que grabaron para la película "Malas Temporadas". El grupo no me va mucho, música agradable sin más; de ambiente, para escuchar una bonita tarde en un acogedor café. Prefiero los modelos a aplicados imitadores. Sin embargo esta versión creo que llega mucho más allá del original. Algunas rumbas me parecen buenísimas pero no ésta. Utilizando una letra banal y sentimental, la bellísima Leonor Watling, ralentiza los lamentos y la interpreta -coño, para eso es actriz- como propia y le queda una cosa de lo más resultona. ¡No estés triste, Leonor! Cuidadín, que es adictiva.




El amor es algo bello que estropeas sin darte cuenta
Te di mi vida entera y mis besos y ahora te alejas
¿Qué quieres de mí?
¿Qué quieres que yo haga más por ti?
Todo el amor que yo tenía, te lo di
¿Qué quieres de mí?
¿Qué quieres de mí?
Vete, me has hecho daño.
Estás vacío, vete, lejos de aquí
Recuerdo aquellos días en que tú por mí vivías
Destruiste ese amor que te di con ilusión
Confiaba en ti, yo pensaba que era todo para ti
Y ahora te alejas sin decirme un adiós.
¿Qué quieres de mí?
¿Qué quieres de mí?

Ya que estamos, me acabo de acordar de otra versión de rumba clásica a cargo de grupo modernete. Los comerciales y ya disueltos Elefantes -no totalmente desprovistos de interés-, se atreven con "Se me va" de Bambino. Otro dramón -hubo un tiempo que yo no podía escuchar esto-. La versión, aquí diferente a la que grabaron en estudio, está muy lejos de la del mítico y maldito Bambino, mucho más visceral. A esta clase de salvajes ya le dediqué en tiempos una entrada.
Ale, espero que alguien las disfrute.


domingo, 7 de marzo de 2010

Duatlón de Torrejoncillo, alta fidelidad sin depilar




No me gustan los duatlones y triatlones sprint. Me parecen carreras demasiado cortas y agónicas. Disfruto más con el otro tipo de sufrimiento, el del prolongado desgaste, el que te acerca a los límites.

Ya lo decían por megafonía, Jaramugos y Jumentos frente a Triatlón Salamanca ¿quién es quién?

Sin embargo, bien sabía que aquí no iba a sufrir demasiado. Debido al estudio y la lluvia prácticamente era el primer día que montaba en bici este año. Un entreno de calidad sin más, un punto de partida para la que se adivina exigente temporada de entrenamientos. Dato importante es que todavía ni me he depilado; en invierno el pelo abriga mucho.

Día desapacible de mucho aire y frío aunque libramos la lluvia. Creo que erá el único que corría "en chichas", machote que es uno :) Por megafonía hablaron de algo más de noventa inscritos pero creo que éramos menos. Campeonato de Extremadura en familia.

La carrera a pie la hice más rápido de lo que pretendía pero cómodo. La bici tranquilo y sin problemas. En el punto más difícil, un repecho de un kilómetro que se sube cuatro veces, soplaba el aire de culo así que se hacía muy fácil.
Al final 1:17 para una buena forma de pasar la tarde del sábado. El Ciego SAbino entró apenas un minuto después. Éste sí que está en el mejor momento de su "carrera deportiva"... y subiendo. Me estoy acostumbrado a competir con el freno echado. Esto puede ser peligroso. Ahora sí que empieza lo bueno.

P.S. Enhorabuena a nuestros maratonianos salmantinos que hoy se nos han marcado un par de carrerones en el Maratón de Barcelona. Clemente con problemas en la parte final, dejándose llevar los últimos kilómetros después de una primera media muy fuerte, ha conseguido unos temibles 2:28 en su segundo maratón y Johnny ha logrado unos sorprendentes y bestiales 2:47 pulverizando en diez minutazos su anterior marca.
Seguro que no os habéis enterado ;-) pero esta noche entregan los oscar. Ya os he hablado de Nick Hornby, escritor británico que me ha hecho pasar muy buenos ratos y en el que me he reconocido en numerosas ocasiones, que ha sabido expresar mucho de lo que siento. Hoy está nominado al mejor guión adapatado por "An Education". La peli no hay que perdérsela. Espero que gane.
Aquí os dejo una mezcla de escenas de "Alta Fidelidad", película y sobre todo libro de culto para muchos de los locos por la música. Nunca se retrataron mejor las estúpidas y trascendentales discusiones que a veces tenemos los "freakies musicales". También aparece la versión de "Let´s get it on" de su majestad Marvin Gaye a cargo del inigualable Jack Black.
Ya en faena una más que no me resisto a compartir, la escena más divertida y tierna -adjetivos que bien podrían definir la obra del autor- de "Un niño grande", otra película basada en un libro de Nick. No soy yo muy de Hugh Grant, pero reconozco que aquí borda su papel de pijo inmaduro y egoista, con versión del "Killing Me Softly" de Roberta Flack incluida.