jueves, 12 de julio de 2012

Si hasta las grandes se buscan la vida


Es lo que tiene nadar en música,  conoces muchas bandas e intérpretes desconocidos, que están empezando o que siempre caminaron por la sombra. Piensas que entiendes el mercado -cuando eso existía- y por dónde se mueve una sociedad previsiblemente imprevisible en cuestión de gustos. Entonces, escuchando algún disco, apuestas, te dices que alguien lo tiene todo para triunfar, que sería injusto o absurdo que no fuera así. A veces aciertas, a veces te equivocas y te preguntas por el secreto del éxito. Tal vez todo descanse en un simple golpe de suerte. 


Dayna Kurtz no es una debutante. Es veterana y ya pasó por aquí. Ahora es más conocida pero no entiendo las razones por las que no ha triunfado de verdad. Lo tiene todo, canciones y una voz poderosa y personal a la altura de las grandes. Estudiosa de la tradición americana temprana, del blues al folk, del rock al jazz, importa con tino tales mimbres a sus composiciones. Además gusta de hacer versiones. De hecho, en su maravilloso último disco, "Secret Canon, Vol 1", pone al día temas de los años cincuenta y primeros sesenta, canciones desconocidas que trata de rescatar del olvido. No, no se trata del gastado truco de utilizar los "estándares" de siempre -que no necesitan ni una puñetera lectura más porque los mejores ya legaron perfección-, para revitalizar carreras decadentes o gastar el último cartucho para tratar de ponerse en la órbita de la fama. Es un disco de verdadero interés. 

Que no ocupe el lugar de Norah Jones, siendo igual o mejor que ella, es una cosa. Que mendigue para publicar su anterior disco, "American Standard", es otra bien distinta. Una curiosidad que encontré en la red. Probad con cualquier disco suyo, no os arrepentiréis.

Vale.


"Invocation"

Would you even know me 
Since I’ve been away 
I wake with my eyes closed 
And sleep through the day 
But I’ll open my heart 
And I’ll learn how to pray 
If mama you let me come home 

I’ve snuck into Eden 
In the hours before dawn 
I’ve stolen the apples 
That dropped on your lawn 
My spirit my pride 
And my innocence gone 
Please mama let me come home 

Oh mama let me come home 
I’ve strayed far from you 
For too little, too long 
I know I’ve been hard headed, 
Selfish and wrong 
Please mama let me come home 

I’m shut out of heaven 
And decades from hell 
I’ve passed out in the shrines 
Where the beautiful fell 
And I’ve burned down the silo 
And poisoned the well 
Please mama let me come home 

I made back alley deals 
That were forged in your name 
I was dazzled by gold 
And the shimmer of fame 
And you knew all the time 
But you never complained 
Please mama let me come home 

Oh mama let me come home 
I’ve strayed far from you 
For too little, too long 
I know I’ve been hard headed,
Selfish and wrong 
Please mama let me come home 

I’ll do all the dishes 
And clean out your shed 
I’ll bring you the paper 
And coffee in bed 
I’ll tell you great stories 
Right outta my head 
If mama, you let me come home 

I’ll be a great sage 
Or a fabulous liar 
I’ll hammer a truce 
Or wage war in your honor 
Follow every spark 
Rising up from your fire 
If mama you let me come home 

Oh mama let me come home 
I’ve strayed far from you 
For too little, too long 
I know I’ve been hard headed
Selfish and wrong 
Please mama let me come home 

Oh mama let me come home 
I’ve strayed far from you 
For too little, too long 
I know I’ve been hard headed
Selfish and wrong 
Please mama let me come home 
Please mama let me come home 


4 comentarios:

Sosaku Runner dijo...

La he visto dos veces aquí en Canarias, algo bastante raro por la poca afluencia de artistas foráneos. Fueron grandísimos conciertos, para mí está al nivel de Norah Jones sin duda, pero sus producciones son más simples, más indies. Saludos,

Atalanta dijo...

A Salamanca vino una vez pero no pude ir, me contaron maravillas. Para la próxima. La conseguiremos poner en órbita :)

Coco dijo...

Más que desconectado, estoy prácticamente desaparecido (el motivo de que mi comentario sea tardío) pero hablar de Dayna Kurtz debe estar al margen de los tiempos y la velocidad con que en Internet la novedad pasa a ser historia.
Recién nacido el blog, fue motivo de una entrada en la que traté de describir el impacto de nuestra primera vez en una pequeña sala de Santander, pero nunca las palabras llegarán a rozar la sensación de una voz que penetra hasta los tuétanos y unas canciones, las originales a la altura de los mejores momentos de Tom Waits o Nina Simone (no estoy exagerando, estoy sintiendo) y las versiones que te ponen la piel de gallina con versos escuchados un millón de veces sin que antes hubieran surtido efecto ninguno.
Su primer y su tercer discos figurarán para siempre en mi estantería de lujo. Cuatro veces he disfrutado de su directo y, aunque con diferentes resultados, no dejaré de recomendárselo a quien tenga oportunidad.
Es única, es especial… pero el mundo es tan injusto que quien debería ser modelo imposible de imitar, citada en cada entrevista, portada de revistas y motivo de mil artículos, parece condenada (como Joe Henry, como Willie Nile, como…) a un segundo plano de culto y la admiración de artistas que nunca más tendrán problemas para pagar las facturas.
Un genio que hace que yo, como mero aficionado, presuma por el simple hecho de tener el BUEN GUSTO de admirarla, la SUERTE de conocerla y el PLACER de que su música me siga arrancando un escalofrío casi cada vez.
UN ABRAZO!

Atalanta dijo...

Coco, ahí te quería ver, el post estaba cojo sin tu comentario; faltaba para cerrarlo y completarlo. Yo también ando desconectado por trabajo y demás y apenas puedo leer. He pensado que quizá nos conozcamos mañana. Abrazo.