"Sí, es
cierto, soy un enemigo del tango; pero del tango como ellos lo entienden. Ellos
siguen creyendo en el compadrito, yo no. Creen en el farolito, yo no. Si todo
ha cambiado, también debe cambiar la música de Buenos Aires. Somos muchos los
que queremos cambiar el tango, pero estos señores que me atacan no lo entienden
ni lo van a entender jamás. Yo voy a seguir adelante, a pesar de ellos."
(Astor Piazzolla)
"La ortodoxia, y estoy plenamente
seguro de ello, a uno de los que le gusta es a mí, pero yo creo que la
ortodoxia debe servir, repito, para invitar a ver nuevas vereas, nuevos caminos
y, si esto está hecho con sinceridad y honestidad, siempre sirve para ver
nuevas experiencias y los errores sirven para ver nuevas ventanas. Cuando se
intentan nuevas cosas, todo no va a salir perfecto, todo no va a salir bien,
eso siempre es un riesgo, para mí sería mucho más cómodo el estar cantando
siempre la malagueña del Canario. Yo soy una persona que me aburre cantar
siempre igual y pienso que la ortodoxia hay que cogerla e inspirarse y
desarrollarla para hacer cosas que inviten a hacer nuevo arte. Porque esto es
una música viva, esto no es una música de museo, si no estaríamos paraos,
estaríamos todavía en la caverna, estaríamos todavía en la fragua, estaríamos
todavía en el campo y esto es un arte de profesionales..." (Enrique Morente)
"El flamenco está hecho, pero sobre lo hecho se puede
seguir creando sin engañar, sin mistificar. ¿Por qué tenemos que hacer todos la
soleá exactamente igual, como si fuéramos un disco? Si yo puedo añadirle algo
propio, enriquecerla, sin desvirtuar lo que es el cante por soleá, ¿por qué no
voy a hacerlo?". (Camarón)
Y es que la voz de la ortodoxia es esta. A José Menese no es que no le
guste la obra de Morente, es que le ofende, le pone enfermo, con
problemas se aguanta soltar lo que piensa realmente. El tono y las malas
maneras de la sacrosanta ortodoxia; simpre vigilantes los guardianes del
templo, siempre por nuestro bien.