jueves, 25 de junio de 2009

Ironman de Niza

¡¡¡Y VUELTA LA BURRA A LA LINDE!!!






¡¡¡BANZAI!!!



martes, 23 de junio de 2009

Triatrock


Cuando llegamos del pueblo a "Capital City", cuando llegas del páramo cultural más absoluto y te encuentras tantas posibilidades, no das abasto. He estado en Madrid un día y los estímulos son ingentes. Para un espíritu inquieto, un no parar. Si yo viviera en Madrid y el tiempo me lo permitiera, me da que estaría metido en mil historias, deportivas y de otro tipo. He visto varios conciertos que os comentaré esta noche y además me pasé por la exposición de la "archiconocida" fotógrafa Annie Leibovitz.

Aquí os dejo un par de fotos, Armtrong y la Iguana, Iggy Pop. Esfuerzo y rock and roll. Tanto el deporte de resistencia como la música y el rock en particular proceden del mismo lugar, de una extraña fuerza interior, proceden de las tripas. No sé si debería haber utilizado esta metáfora porque probablemente la recuerde el domingo cuando mis tripas no vomiten actitud sino fluidos.

Aquí os dejo una canción de los Stooges de Iggy. Siempre digo que si tuviera que explicarle a un extraterrestre qué es el rock and roll utilizaría una canción suya, usaría la guitarra salvaje de Ron Asheton. Aquí ya están viejunos, Ron está fondón (incluso me parece recordar que murió este año) y la versión está bastante suavizada aunque el toque de los vientos no le queda nada mal.

Con todos vosotros un clásico, "I wanna be your dog". El punk había nacido en Detroit mucho antes del terremoto mediático londinense provocado por los Sex Pistols. Esta noche os pongo algo más suave.

lunes, 22 de junio de 2009

Esplendor en la hierba



Después de muchos meses de indecisión, se acabaron las dudas. Desde el principio la P2 fue una de las candidatas y aunque a última hora la Specialized Transition murciana estuvo a punto adelantarla en línea de meta, la Cervelita madrileña ganó por un cuerpo. Bueno, en realidad no es madrileña sino californiana. De ahí el extraño color que no se comercializa en Europa. Se la he comprado a Ricardo, conocido en los foros triatléticos como Kayto y al que deseo mucha suerte en su Ironman de Canadá en Agosto.
Pues eso, que para escarnio de mis amigos no deportistas, espero conseguir la medalla de "finisher" en muchas carreras.
Se llama Lady Macbeth (hay que encargar las pegatinas) y las fotos no le hacen justicia, es mucho más bonita al natural.
Las ruedacas se las había comprado al doctor y el manillar pronto estará de camino desde Pamplona así que las mayores inversiones están hechas. Unas cuantas piezas más y ya la presentaré en sociedad como Dios manda. Con esto sí que ya hay que ponerse serio y entrenar para parecer un triatleta de verdad. Aquí os la enseño desnudita, la pobre.

martes, 16 de junio de 2009

El camino del "finisher"


Asesorado por el maestro, llevo unas semanas entrenando de una forma nueva, cumpliendo planes. Me he encontrado con una reconfortante sensación extraña para mí. El objetivo es claro, cruzar la línea de meta en Niza. Sin embargo, con asombro soy consciente de una nueva, ajena y gratificante emoción, la que reporta en sí misma cumplir con el entrenamiento, con la planificación . En esto andaba yo y era consciente de que ya no pensaba sólo en triatlón sino en la vida misma.

En una ocasión habló Clemente de las “casualidades”. A veces dudo de si existen ciertas situaciones que podemos considerar extrañas o incluso “mágicas”, que guardan algún oculto significado. En este caso fue una extraña conversación en el Ayuntamiento sobre los años de estudiante. Dándole vueltas al tema de la satisfacción del entreno en sí, de cumplir con la obligación, con el trabajo, sin pensar en la meta, de pronto me veo empantanado en una extraña y amenazante imagen: en si toda mi vida nunca fue bien planteada. Nada menos.
Supongo que la vida me trató bien. Sé que desde crío no me costó esforzarme demasiado para conseguir logros académicos. Siempre fui dagal de sobresaliente en notas medias finales y con alguna que otra matrícula de honor. Sin embargo, tal vez por ello no soy afortunado porque al fin y al cabo se crean malos hábitos y llega un momento en que la entidad del reto requiere algo más que "buena genética." Paralelamente, en nuestra carrera deportivo-globeril hemos ido abriendo puertas y escalando muros cada vez mayores, y como buenos jaramugos siempre hemos llevado por bandera nuestro anárquico y escaso entrenamiento, pero como en la vida quizá ha llegado un momento en que para cruzar ciertas metas, hay que apostar fuerte y pelear más duro. Martin Amis en "Dinero" escribía una frase simple y contundente que me llegó al instante: "Sólo hay una forma de aprender a pelear, peleando mucho".

“Un hombre es el espacio que ocupa”. Es un proverbio japonés que utiliza uno de los personajes de “Mad Men”, la serie de la BBC que devoro con fruición y que recomiendo con entusiasmo. El mensaje se refiere a que lo que importa es lo que hagas a partir de ahora. Tal vez tu pasado lastra pero a quién le importa. Tú “eres” ahora.

Estoy a punto de dar un paso importante laboralmente. Arriesgamos buscando nuevos horizontes. La inestabilidad de los interinos se tornó pánico hace unos meses. Afortunadamente llegó la calma pero el aviso no se olvida. Necesitamos abrir otras puertas. Necesitamos esa fuerza para cumplir con la planificación diaria y que la cifras de mis “horas de estudio” comiencen a crecer. Ése es el objetivo tras el verano.

Y sigo caminando y sigo reflexionando sobre otras cosas y sí, quizá nunca fui lo bastante valiente para merecerme a la chica que amo. A día de hoy, sigo construyendo diques que continúan derrrumbándose con una mirada de sus “azules” pero, si soy sincero conmigo mismo, nunca me esforcé de verdad. Ahora todo ello ya no tiene sentido y es hora de pasar página.

En fin, a lo que quiero llegar es que tal vez no es el ironman, no es la oposición, no es ella lo realmente importante. Tal vez lo realmente importante es merecer ser “finisher”, cruzar esa línea de meta, conseguir esa nota o abrasarse en su pálida piel porque verdaderamente eres digno de ello, porque has peleado no un día, sino en silencio muchas horas en tu celda, en tu propio infierno.

martes, 9 de junio de 2009

Integral de los Montes Aquilianos

Carreras de montaña. No sé si tenéis experiencia en este tipo de pruebas. Son largas y duras, suelen transcurrir a través de parajes preciosos y acabas destrozado, muscular y mentalmente.
El sábado me enfrenté a una carrera a la que ha tiempo le tenía ganas, la “Travesía de los Montes Aquilianos”, 66 kms alrededor de Ponferrada.
No entro en detalles. La carrera es bonita, no tiene un perfil asesino y es “corrible” durante alrededor de cincuenta kilómetros por pistas, crestas, senderos y descensos. Únicamente una subida larga y de tirar de gemelos y riñones durante más de una hora. Como siempre, yo no he hecho nada de montaña este año y lógicamente he acabado con dolores en todo el cuerpo y las agujetas me siguen atormentando cada vez que bajo escaleras. Las bajadas de fuertes pendientes obligan a trabajar a los cuadriceps sin descanso.
Más de nueve horas dan para mucho aunque se pasa más rápido de lo que pensáis. Aquí os dejo unas cuantas fotos. Si os gusta la montaña, no os perdáis la zona. Imagino que la montañera Isadora ya se habrá hecho unas rutas por allí.
Durante la carrera, un pensamiento me rondaba la cabeza, los 166 kms del Ultra Trail del Mont Blanc dan miedo de verdad. Confiaremos en nuestro entrenamiento estival. Por muy jaramugos que seamos, este verano toca hacer muchas horas de entrenos en Gredos, Batuecas o Gata.

La salida a las seis de la mañana



Peñalba, un pueblo encantado en medio de la nada


Antes de llegar a las cumbres, a la niebla y al frío, nos empapamos de morado y amarillo

Cerca del final hay una zona de senderos entre robles preciosa. Correr por aquí es un placer

"¡¡YO SOY ESPARTACO!!"