Vamos a relatar lo que viene siendo una prueba de ultrafondo de montaña a la usanza. Iba a decir a la vieja usanza pero esto de viejo, tiene bastante a poco. Es en los últimos años cuando el crecimiento tanto de pruebas como de participantes ha experimentado un desarrollo, por momentos y en algunos aspectos, incluso preocupantes. Es sorprendente cómo ha ido evolucionando el mundo del material del corredor de montaña en los últimos tiempos. Hay verdaderos figurines con lo último de lo último. A mí me da que esta actividad es bastante más simple de cómo nos la quieren presentar pero al fin y al cabo, todo esto es un gran mercado al que se le vislumbran unas posibilidades tremendas.
Igual que a Madrid le falta un ironman, carencia que parece ser, será subsanada el próximo 11 de Septiembre -mal día, aunque los auspicios no son buenos, confiemos en que sobreviva- , también echaba de menos un ultratrail de montaña. La legión de corredores montañeros de ese inmenso panal así lo demandaba. No es necesario ir a los Pirineos, a Euskadi, a Los Alpes. Podemos pasarlo igual de mal a la puerta de casa. Ahí estaba el "irresistible" gancho de la prueba.
Mi impresión sobre la carrera es en general positivo. El circuito me ha parecido menos montañero de lo que esperaba. En mi opinión hay demasiados tramos de pista para los que estaría bien buscar alternativas si es posible. La organización perfecta. Yo me perdí dos veces pero fue más debido a nuestra negligencia que a la de la organización. A pesar de los cinco mil metros de desnivel positivo y mis más de ciento veinte kilómetros de montaña -medía más y con las dos pérdidas, ya sí que me salí de la tabla-, mi impresión general es que no es tan dura como se esperaba o es que quizá me estoy mal acostumbrado a sufrir. A ver, entiéndanme, si alguien me ve ayer por las calles de Guadarrama, echándome un siestón descalzo en un parque a la sombra, caminando como un "ecce homo" doliente, haciendo cualquier movimiento al ralentí, metido en la fuente del pueblo cual guiri borracho, dando vueltas a la misma con cara de gustito, mientras mis maltrechas piernas y mis pies hinchados agradecen el frescor del agua de la sierra, podrá pensar que soy un fantasma. Es una carrera dura, muy dura pero no de las más duras. Entrenando y corriendo con cabeza, esta prueba se pude hacer muy bien. Ya sabes a lo que vienes, al deterioro total y a partir de ahí, a sobrevivir y tirar de cabeza.
Vamos con una crónica de mi experiencia propiamente dicha. No tengo fotos porque perdí la cámara. Ha sido después de carrera, creo que en el pabellón. Confiemos en que aparezca, que el que la encontrara, la devuelva -mi carnet estaba en la funda-. Supongo que la organización pronto facilitará fotografías de los participantes para poder poner alguna mía.
8 de la mañana. Salida. Tengo en mente salir a buen ritmo y luego ya se verá. Subida a La Maliciosa, quizá la más dura de la carrera pero vamos frescos y se hace bien, rápido. Arriba comienza a llover y la niebla nos envuelve pero no hace frío. Se oye algún trueno pero el tiempo no empeora.
Bajamos rápido corriendo hasta el Collado de la Dehesilla -una bonita zona que más tarde un madrileño me dijo que se trataba de la mítica Pedriza-. Me siento fuerte, no dejo de pasar gente. No debo andar mal en la clasificación. Bajamos volando para encarar el ascenso a la Morcuera a mediodía. Subiendo por una larga pista, me empiezo a dar cuenta que comienzo a sentir síntomas de debilidad. He comido bien, pero subiendo engullo todo lo que puedo aunque no dejo de tener sed. A pesar de tener mucha suerte con el tiempo, creo que ha sido la carrera que más líquido he bebido. Voy viendo que la gente que marcha a mi alrededor tampoco anda "muy allá". No sé si es porque se trataba de la primera edición pero he visto actitudes muy extrañas, como de muy pardillo en algunos momentos. Gente que marchando jodida -eso se nota en la forma de caminar-, subiendo una pista, se ponía a correr pequeños tramos para únicamente salirse de punto y desperdiciar fuerzas que después necesitarás, sin ganar nada a cambio.
LLego a la Morcuera supongo que por el lado de la que me pareció la famosa última rampa del puerto tan "mentá" por ciclistas y triatletas (la que se baja en la "Perico"). No es ni el km. 40 y estoy muy cansado. Me echo a descansar en el avituallamiento mientras como y bebo demasiado. El descenso hasta Rascafría es fácil pero voy tan "empazonado" que se me hace cuesta arriba la cuesta abajo. Todo ese tramo se debe hacer corriendo pero me detengo de vez en cuando para seguir caminando. Ya empiezo a pensar que madre mía... todo lo que falta. Malos pensamientos demasiado pronto. "¡¡¡ SSappe!!!" Una pista monótona y eterna -hay que buscar otra alternativa en ediciones posteriores- nos conduce al pueblo. Pasamos junto a unas piscinas naturales en torno a las cuatro de la tarde, con un agua que de tan fresquita que parece, sólo invita a pegarse un chapuzón. Ves a las señoritas tumbadas en biquini en la hierba y sólo te apetece sentarte a tomar una cerveza y echarte un buena siesta. Pasa el espejismo, llegamos a Rascafría. Otra vez como y bebo demasiado pero es que....¡¡TENGO HAMBRE!!. No puedo ni trotar hasta el inicio de la subida al Reventón. Me han ido metiendo miedo con este ascenso pero no es tan duro. Siempre es mejor esperar lo peor. Es larga pero se hace bien. Al principio me costó coger un buen ritmo, voy medio fundido, pero me fui estabilizando y llegué arriba entero.
Consigo correr por las crestas hasta Claveles en la que a mí me pareció la zona más bonita de la carrera. En el segmento en que me mueve todos están obsesionados con llegar a hacer la bajada de Peñalara de día. Objetivo conseguido. Mientras gestiono con prudencia la zona de los batolitos entre Claveles y Peñalara, pienso que pasar esto de noche debe tener su gracia. Tras el descenso propiamente dicho de Peñalara, en el puesto de control nos informan de que España marcha 0-0, que han fallado dos penaltis y bla, bla, bla.... ¿os suena? Hasta la Granja hay un primera zona entre pinares muy agradable y acogedora. Me he quedado solo y voy pensando en que es curioso que España entera esté sufriendo con el partido delante de la tele y yo me encuentre aquí perdido, en medio del silencio mientras comienza a anochecer, sintiendo la amenazante llegada de los múltiples dolores que están por venir. De pronto, en medio del monte se oye un "¡¡¡¡GOOOOOLL!!!" -algún participante llevaba radio-. Hay que rendirse. Es un enemigo demasido fuerte. Para escapar, habría que vivir en Marte... y "cuidao".
El último tramo de descenso hasta La Granja es complicado, pronunciado. Aquí me saltan todas las alarmas. Los pies me duelen horrores. LLevo las plantas machacaditas. Un par de uñas me están dando la lata. Cada vez que me tropiezo, blasfemo sin remedio. Los cuadriceps me arden. Estoy escocido, tengo rozaduras en "mis partes", en los dedos de las manos a pesar de llevar guantes para los bastones -es la primera vez que los uso este año y en este recorrido no son necesarios-, una herida en la espalda... Toca sufrir. LLego a La Granja. Bocadillo de salchichón y cocacola y para delante. Echo de menos algo de pasta. Los pies mejor ni tocarlos que sólo empeoras. Nos queda toda la noche por delante.
Me han dicho que el ascenso a Fuenfría y Navacerrada es suave. Pasan los kilómetros y así lo parece. Empiezo a charlar con Juan Carlos, un chaval de Madrid, después se nos une Álvaro que iba algo más tocado y así hemos ido ya hasta el final, contando la vida. Esos kilómetros nocturnos en compañia pasan más rápido.
Nos perdimos dos veces. Como eran de la zona, pensé que conocían el circuito. Para los que sepáis el recorrido, nos subimos la "Carretera de la República" entera, una especie de Mortirolo hasta que al llegar arriba nos dimos cuenta que no había señales. Hemos tenido que ir por la pista hasta enlazar con Fuenfría. La organización nos dijo que habremos hecho cuatro o cinco kilómetros más, evitando una cuesta muy dura de subida.
En una hora justa hacemos el "Camio Schmidt" hasta el Puerto de Navacerrada, caldito en el Albergue de Peñalara y subida de un kilómetro antes de iniciar el descenso a meta. En algún momento del sendero por el que trascurre la tubería -para los de Madrid-, no enlazamos con el desvío de descenso que marcaba la carrera y hemos seguido "tó palante" hasta la "pista de las bicis" con lo que hemos tenido que bajarla y retroceder hasta donde enlazaba con el sendero hacia Navacerrada. Ahí ya no sé qué propina llevaríamos. Con estos paseos nuestras optimistas previsiones han ido pasando de las 22 a las 24 horas.
El último sendero hasta Navacerrada se hace bien. La última pista, llena de pequeñas piedras que trocean mis plantas, en parte debido a que mis zapatilllas ya llevan demasiada horas de vuelo y no me atreví con las nuevas por si no estaban "hechas", se nos hace mucho más larga que en el inicio de la aventura veinticuatro horas antes, cuando éramos todo ganas, fuerza y risas. Al entrar en el pueblo, me adelanta un grupillo corriendo que me anima a que los siga. Marcho con ellos a buen ritmo algo más de un kilómetro, alcanzando a otros participantes que se suben al tren, entrando en meta un pequeño pelotón de unos diez atletas, donde me sentí fuerte y que me hizo pensar que tal vez me debería haber animado a correr antes. Ya veremos en otra ocasión. Todo es experiencia. Buen entreno para Tor de Géants, la cita clave del año. 23 horas y cuarenta y cinco minutos. Puesto 117 de 260 participantes llegados a meta. 221 abandonos.
Una hora después, tras ducharme y masajearme los pies -ay que gustito, por Dios-, consigo dormir algo más de una hora tirado en la esterilla con mi saco en una puerta del pabellón.
Después de escribir esta crónica, cuanto más tiempo pasa, mejor recuerdo tengo. A esta carrera volveré. Se puede hacer en mucho menos tiempo e irte a la cama a la hora de una persona medio normal o incluso a la de las personas normales, la de después de las cervezas una noche de un sábado de julio.
Durante la primera parte de la carrera, cuando todo iba bien -después ya sólo pienso en soldados pasando penalidades-, se me metió en la cabeza la música de la banda sonora de "El último mohicano". Ese bucle de violín infinito que suena mientras Daniel Day Lewis, durante toda la película, recorre kilómetros a través de los senderos de los montes del Canadá. Entonces no sabíamos que esto de correr por las montañas era algo factible. El último mohicano, ¿el primer "trailero" de la historia? En tiempos me contaba un amigo que vio a Stephane Grappelli, famoso violinista de jazz francés, tocar esta pieza. El hombre estaba a las puertas del último viaje, casi lo tenían que llevar en brazos hasta la silla del escenario. Era entonces cuando se ponía a tocar el violín de una forma sorprendentemente enérgica y endiablada. La poca vida que le quedaba se le escapaba a borbotones a través de su instrumento.
29 comentarios:
Estupenda crónica Abel.
Si no te importa, pongo un enlace en mi blog.
Enhorabuena por finalizar el GTP.
Buen verano y buenos entrenos para el tor de géants.
Ole tus huevos Runner Man. Que crack estás hecho, y yo me quejo de mis 10K de ayer.
Saludos
gran cronica!!!!!
y muy buena carrera amigo.
Hoy he visto un video que me llamo mucho la atencion y al publicarlo he pensado en ti por las cosas que siempre publicas y que me gustan, asi que te te lo he dedicado compañero
un abrazo
De nuevo enhorabuena crack!!
Where is the limit?
Como siempre excelente crónica.
Me duele todo solo de leerte y pensarlo, no me hago una idea lo que habrás sufrido.
Curioso lo de como te enteras del resultado de España, el fútbol es impresionante y como dijo Gary Lineker juegan 11 contra 11 y siempre ganan los alemanes. Esperemos que el miercoles se equivoque, pero veo a Alemania un portento físico y los nuestros en el minuto 60 están muertos.
Yo estos días por el Levante descansando del trabajo, porque correr sigo entrenando, aunque aqui voy fatal, la humedad es tremenda y me encuentro cansado, agotado, sin fuerzas.
Después de leerte me da vergüenza decirlo pero no fui a la carrera de Ibi, 16 kms de montaña, un calentamiento para tí.
Espartaco, ole tus santas pelotas!!!!
Te he visto "apuntao" a Peña Negra y Tremedal. Después de estas calamidades ¿Tu vas a estar el domingo entero pa la "sofocaera" que nos espera?
Chelis, muchas gracias, hombre. Tengo pendiente la crónica de esa temible Travesera.
Jordi, no te creas. Es como todo, ir haciendo el cuerpo poco a poco y "disfrutar" con lo que haces. Venga, a por esa media. LLegamos seguro.
Germán, gracias hombre. Ya veo que piensas que soy un tipo raro, raro, ja, ja. Un abrazo.
Michel, tú descansa que lo necesitas más que yo. Cuando vosotros casi acabáis la temporada empiezo yo. Lo del gol es de traca. Yo creo que el miércoles ganan. He visto dos partidos -lo bueno que tiene el fútbol es que puedes hacer otra cosa a la vez y levantar la vista cuando el locutor sube el tono- y yo creo que ganan. Me parece que tienen muchos recursos.
Phaeton, bueno, como mucho eso son seis horas. Como tú dices, un deporte normal, que estás a la hora de comer en casa. Habrá que ir con calma. Ya sé que en El Tremedal tocará sufrir pero los ciento cuarenta kilómetros pienso chupar rueda como un perro. Aquí lo que interesa es llegar en forma a "Todus lus frentis". Las jaramugadas son la cita clave del año :) Si te vas el domingo, me voy contigo.
Enhorabuena!! que grande!
Muy buena la anécdota del gol, ni en el monte jajaja
En tos lus frentis!!! Sí señor. Te ví extrañamente cerca en las clasificaciones. Edu y yo ibamos haciendo cábalas por la Pedriza de por dónde andarías. Que veas que estuviste presente en nuestros pensamientos.
Yo discrepo porque no conozco muchas más zonas de UT europeas: es un recorrido al que no le falta de nada. Jodó con los senderitos.
Un abrazo, champion
SPJ
Buf!!, me ha puesto la piel de gallina el último tramo de tu relato. Los pensamientos con el último moicano y el violinista casi al final de su vida derrochandola mientras tocaba....
Mientras tu corrías, yo, como un hereje, me encontraba en el fun Park de Hyundai para retratar lo que allí vivirian miles de almas... al menos por fin entendía porqué el futbol es como es.
Atalanta,
te lo digo en português:
PARABÉNS, ÉS VALENTE!
he leído con gran interese tu relato, te deseo pronta recuperación,
un abrazo
Grande Atalanta!! sufriendo como tu sabes pero finisher.
Si vuelves, me animo...
ya sabes a lo que vienes, al deterioro total...
dicho todo, como la Operación Muerte del Ejército Nipón.
mucho retirado, demasiado, mucho principiante pardillo? no es tan dura, la más, o tú ya estás de vuelta de todo?
Enhorabuena por acabarla y por contarlo tan amenamente.
No sé si serás el único que dice que 'no es tanto como parece', pero lees crónicas y parece la guerra. Desde fuera no me parece tanto, con todos mis respetos, por eso me parece escandaloso el índice de abandonos. ¿A qué crees que se ha debido? ¿Demasiada gente infectada con el virus ultra sin haber cumplicon con pasos previos?
A cuidarse,
s
Vete buscando otro "sobrenombre" ...ESPARTACO se te queda corto.
Me ha encantado la crónica, eso de ir viviendo esos lugares tan emblemáticos y sin cansarme ..... no tiene precio jajaja.
Lo del gol es para nota ... me parto
Ah!! no te dije nada pero la canción de María Bethania ¡¡me encantó!!, y la banda sonora de el ültimo MOhicano me flipa, la verdad es que muy buen pensameinto para esa carrera acertaste, la voya a escuchar otra vez me da mucha vidilla.
Yo en Sta. Pola genial, no nadé, pero lo pasamos muy bien y esta vez Chema se quitó la espinita de Cullera, un buen entreno con Juanlu -su compi de cruce el Estrecho para septiembre- disfrutaron mucho, sin medusas, y con el agua "normal", no demasiadao caliente para ser Sta. Pola.
Que sigas disfrutando de todoooooooo!!!!
Besicos.
madre de Dios! jajaja efectivamente empeñado en sufrir, eres Mildo II, eres Espartaco y el Mohicano ese juntos!! investigaré el reto que te estás preparando, el tor de géants, debe ser ya la pera y encima disfrutas, lo de que oyeras el gol en mitad del monte me ha dejado loca?¿. Que no te gusta la cahipirinia, se puede entender, yo es que no soy mucho de bebidas destiladas (me van más las fermentadas y poco), así que tomo sucedaneos para dar ambiente que sé que la gente que no bebe en determinados círculos resulta sospechosa jejeje, también me gusta el mojito con sombrilla y bengalas
Pero bueno, no se ha guardado mi comentario, repito con la misma convicción: ERES ESPARTACO Y EL MOHICANO JUNTOS! nasío pa sufrir,jajaja, encima disfrutando y como un entreno para el tor de géants, que suena tremendo, sólo el nombre da miedo. Lo de que se oyera un gooool en mitad del monte me ha dejado loca?¿ No te gusta la caipirinia, se entiende, yo es que no soy de bebidas destiladas (me va más la cervecilla y el vino y poquito) pero en determinados ambientes resulta bastante sospechosa la gente que no bebe, no somos de fiar jejeje, así que tiro de esto que es dulce y fresquito, también me gusta el mojito con sombrilla y bengalas, cuantas más mejor.
caro Atlanta, te lo digo en português:
PARABÉNS, ÉS VALENTE!
he leído com mucho interés tu relato
un abrazo
Pedazodemierda, el comentario de esta mañana se ha perdido entre unos y ceros.
No es que resolviese ningún enigma histórico, eran sólo dos cosas:
1. que enhorabuena, otra al saco; se te lee bien, pasándolo mal a ratos pero controlando;
2. preguntábate del porqué de tanto abandono. Lo he planteado en el blog de Spanjaard y se ha entrado al trapo. Me parece que demasiada gente iba a probar suerte sin haber cumplido algunos pasos previos, que son inevitables o compramos papeletas para el DNF.
Saludos,
s
Furacán, gracias, sí es que fue muy gracioso.
Spanjaard, me sobreestimas, compañero. En general, satisfecho. Siempre acabas una burrada de éstas, estás contento. No he acabado contento porque desde la Morcuera, me estabilicé en las malas sensaciones. Me gustaría repetirla para hacerla mejor aunque imagínate correr con este calor, algo que en teoría debe ser lo normal. Ya me contó Eduardo. Ya nos veremos.
Afcavasco, muchas gracias de nuevo. La recuperación mejor de lo esperado. El domingo literalmente destrozado pero ayer ya estaba bien, casi si dolores.
Mae, gracias mujer, pero Espartaco pasó ratos muy jodidos. Conocí la Pedriza de la que tanto habláis y me enteré después. Sabía yo que la canción de María te iba a gustar.
No sabía que Chema iba a por el estrecho. Qué tío. Me alegro que se recuperara. Ya leí sobre el susto. Me hiciste gracia con lo de que "si es que está muy flaco". :)
Fara, ayer tuve yo problemas con los comentarios y Agostinho también me dijo que no podía escribir. Cosas del internerrr de Enjuto (LLamo al servicio técnico, apago y enciendo el router...:) De entreno y disfrutar poco. De sufrir mucho, aunque ha habido días peores. Yo soy de un buen vinito comiendo y de cervezas -cuando nos ponemos, tantas como kilómetros-. De copas, na de ná. Hombre de costumbres.
Algo están toqueteando los de Blogger porque a mí tampoco me aparecían en mi blog, y ahora sí; y veo que ahora los dos míos también salen. Informática sucks.
s
Joder, con el blogger, esto lleva unos días un poco loco.
Nacho, supongo que eso será una superpantalla gigante. Ostras tú, si yo aparezco por ahí, creo que no vuelvo a ver un partido en mi vida. Miedo me daría. Pues mira que tanto en el MAM como aquí me acordé de vosotros, me decía que a lo mejor andabáis por ahi y como ya te comenté podía darle un achuchón al perro más famoso de la red.
Arturo, tú habías podido con ella con solvencia. Tú ya sabes de qué va esto.
DAvid, algún día lo sabrás porque si quieres cumplir uno de tus sueños, es algo muy similar. A ver, yo haría más 120 kilómetros de montaña y eso es un palizón de padre y muy señor mío pero dentro de los ultras que he corrido me parece el más asequible. El final, cuando todo el mundo va tostado es muy importante y aquí es muy suave. Si aquí llegas con fuerza y puedes correr, le pegas un viaje importante al cronómetro y la clasificación. UTMB son continuas subidas y bajadas de "Maliciosas". En España la Hiru y la Transgrancanaria me parecen mucho más exigentes. Puede andar ahí,ahí con Madeira.
Sergio, no sé. Yo no he estado al tanto de lo que se ha cocido en los foros sobre la carrera -no soy de calentarme la cabeza con datos previos-. Algo me contaba el Ciegosabino sobre las quejas sobre el recorrido y demás, ¡meses antes del día de la prueba! Creo que la gente se pone demasiado nerviosa. Yo para esto soy muy "dejao". Que si tracks, que si porras... Yo me planto allí el día en cuestión y sigo el camino hasta meta. No me hace falta más. Ya contaba que subiendo Morcuera -algo de eso ha comentado Luis respecto a los abandonos por tramos-, cuando el cansancio se empieza a notar de verdad, vi gente que se me asemejaban a peces boqueando fuera del agua. A alguno me daban ganas de decirle que parara quieto, que así no iba a llegar a ningún sitio. Yo andando rápido, con zancada larga, subía más deprisa que gente funcionando a impulsos. Si no puedes subir corriendo, busca tu ritmo... ¡que nos queda casi toda la carrera! No sé si se habían montado unos tiempos de paso utópicos, sin conocer el desgaste que el paso de las horas implica en una carrera tan exigente y trataban de cumplirlo a toda costa, simplemente sacrificando la meta. O quizá hay que ver menos vídeos de Kilian y Karnaces. Yo lo único que tengo claro es que me conozco muy bien y aunque esté hecho una mierda, sé que me puedo entonar. Entre los extravíos y la mala sensación general, me da la impresión de que le puedo quitar unas cuantas horas al recorrido. La experiencia en este tipo de pruebas es fundamental y cuando llega ese momento que parece que no se puede ir más allá, un corredor curtido sabe que es mentira, que se puede ir mucho más allá. Quizá mucho debutante no sabe bien de qué va esto, que tiene que ver poco con el MAM -conmingo venía un chico con 5:15 en el MAM, totalmente fundido, lo dejamos andando a tres kilómetros de meta-. Antes de salir, sólo firmaba veinte horas. Si vuelvo, ése será mi objetivo, bajar de veinte. Me parece realista.
Vaya, compadre, pues así leído parece hasta corto. Subimos a ..., bajamos a ... llegamos a ... comemos en .... y llegamos a meta, y ya está, joer no ´se dónde te puedes haber cansado y cascado tanto, jajajaja.
Leyendo lo del gol me ha venido a la cabeza nustro Primer "ultra", jajaja ¿te acuerdas?, los 100 de Corricolari, a las 12 de la mañana con el día más caluroso seguramente de los últimos 100 años ( o casi, jeje) en el aparcamiento de la Peineta y un montón de coches con la radio puesta para acabar de confirmar nuestra eliminación en un mundial a manos de ¿Corea? (creo que era Corea). Y lo que ha llovido, y lo que hemos pasado por esos montes de Dios.
Me había extrañado haber quedado tan "cerca" de tí en Meta; ahora ya me lo explico, sin esos 2 extravíos hubieses estado mucho más cerca de las 20 horas que de las 25. Yo, sin embargo, aún no sé cómo lo he hecho, no creo que pueda mejorar en próximas ediciones.
Enhorabuena de nuevo, recupera y a preparar el TDG.
P.D:Siento lo de la cámara, esperemos que la haya encontrado alguien honrado y te la haga llegar.
Elage.
¡¡Falto yo!!
Abel, lo tuyo no tiene nombre.
Sí, llego para abroncarte. Y no es porque hayas hecho nada malo, no, sino mas bien por envidia y no sé si de la buena, mira.
Apuntarse a cosas de estas dice mucho del coraje de cada uno, hacer la mitad, ni te cuento acabarlas es el no va más... ¡Pero pensar en volver!
Lo dicho, enhorabuena. Aunque no estaba seguro de si debía hacerlo.
Estás mal, muy mal, si quieres volver.
Aparte de felicitarte, que es obligado, un comentario. Creo que lo de los abandonos se debe a que ahora es muy fácil leer crónicas como la tuya (o la de muchos IM que por aquí pululan) y todo parece llegar, correr y colgarse la medalla al cuello. Si hasta una maratón parece poca cosa! Y claro, no es tan fácil. Uno no acostumbra a su cuerpo y su cabeciña en dos o tres carreras, sólo porque le gusta mucho correr (o lo que sea).
Ciego, si al final es como UTMB,"parriba y pabajo" hasta el final. No hay que darle más vueltas. Yo también me acordé el sábado del partido de Corea. Nuestro debut en ultrafondo, en mi top five de momentos más jodidos de mi carrera globeril. Probablemente eso le pasó a alguno el sábado. Tú pesabas más de 90 kilos y mi mítica frase previa a la prueba, "Vamos, no jodas, que andando lo hace mi abuela a la pata coja". ¡Cuántas veces me acordé de la frasecita aquella noche! Pero aquel día sí que le echamos la tercera "c". Ahí sí se vio que esto era lo nuestro.
Eduardo, no sé cuánto perdería ¿hora y media? Te digo lo que a Luis, me veis con buenos ojos. La Napo la acabaste tan o más fuerte que yo pero eres menos temerario. Lógico porque es la primera vez. Para mí, acabar cualquier carrera de este tipo es un éxito. El próximo año cogemos a Luis y nos lanzamos a lo bruto. Seguro que lo podemos hacer mejor o fenecer por el camino. Ya te dije, si la cosa se tuerce, te enroscas a dormir una siesta y mano de santo, por lo menos para acabar. La cámara me da que pasó a mejor vida. Espero que al menos me hagan llegar de alguna forma el carnet. Nos vemos en la próxima.
Mildo, porque tú eres muy metódico y prudente pero un día tienes que probar la montaña. Algo de veinte o así. Me da que te acababas enganchando. Para estas largas hay que estar un poco chalado pero, dentro de un margen, se acaban dominando. La experiencia lo es todo.
Xocas, quizá haya algo de eso. Para las características de la carrera, casi un 50% de abandonos es exagerado. Ese porcentaje es el normal en UTMB pero ahí me parece lógico. Quizá haya mucho debutante que no es consciente de la dureza, tal vez haya pasado como a mí con el IM. Yo no le di la importancia suficiente a la entidad del reto y me he estrellado varias veces. Un IM no tiene nada que ver con un medio. Me presento en la línea de salida sin un entrenamiento adecuado confiado en que yo no me retiro nunca de nada. Ahí aparecen mis problemas de estómago contra los que no puedo luchar por mucho que me empeñe. Este año ya no me cuadra intentarlo pero probablemente en el ICat de 2011 volveré, espero que entrenado, con el debido respeto que la prueba se merece. Por lo que he leído de experiencias similares, puede que tampoco así puede vencer mis problemas de estómago que tienen mala solución, pero frivolizar el reto a priori es peligroso, cosa que creo que sí ha pasado en GTP por parte de muchos atletas.
Gracias a todos por vuestros comentarios
Excelente crónica, pero buff... a pesar de que soy un apasionado de los deportes y practico varios, se me hace muy cuesta arriba todo esto. Aún así, me parece una heroicidad. Te felicito por ello. Abrazo.
Wood, gracias hombre pero de heoicidad nada. Es meterte en el mundillo e ir subiendo escalones. Para terminar no hay que ser un figura. Otra cosa son los de alante.
Publicar un comentario