viernes, 7 de mayo de 2010

La magia del cine

"Nuestro propósito, nuestra lucha, es crear arte. Nuestra arma la imagen en movimiento y, puesto que es una imagen en movimiento, podemos acercarla o alejarla a nuestro entorno, convertirla en poesía mediante sombras que se alargan y se ocultan, iluminarla de modo que la luz esculpa los rostros, ya reflejen alegría o agonizen. Y envolverla en una música que perdurará para siempre porque tendrá un contexto, tan cierto como segura es la muerte. Somos científicos comprometidos con la creación de memoria, pero nuestra memoria no se enturbirá ni se desvanecerá".
(F. W. Murnau)

5 comentarios:

CiegoSabino dijo...

Buenísimo.

Nunca lo había pensado, pero qué razón tiene.

No me extraña que se expresara así, porque creo que en los orígnes del cine sí que tenían que ser algo científicos para manejar líquidos, exposiciones, películas, sensibillidades, luces y sombras, etc, etc, nuevos alquimistas en busca en este caso del arte a través de la ciencia y la experimentación. Pero no se podían quedar simplemente en reflejar la salida de los obreros de la fábrica o la salida de la misa de 12 de El Pilar, había que buscar algo más que el simple documento.

TSI-NA-PAH dijo...

Muy buen post amigo, genios del arte, al servicio del recuerdo infinito, sin lugar a dudas.
un abrazo

davidiego dijo...

aún recuerdo la proyección de Nosferatu en una pared de la Catedral de Nuremberg, con música en directo, un par de días antes de Roth...

Furacán dijo...

Muy bueno

Unknown dijo...

Ciego, ahora ya no lo pensamos pero el sentir de los pioneros en los albores del cine debía ser excitante de verdad, ir avanzando, consiguiendo nuevas soluciones y logros.

Tsi, las gracias a Murnau. Me gusta porque refleja el carácter revolucionario de las nuevas técnicas, capaces de fijar recuerdos que nunca se olvidarían, que se podrían rememorar una y otra vez. Es sencillamente poético.

Doc, menudo lujazo. Nosotros estuvimos en Nuremberg dos días después del IM y también proyectaban películas. No recuerdo cuál aquella noche. Sí que días antes habían puesto "Once".

Furacán, muy bueno Murnau. Cuanto más lo leo, más me gusta.