jueves, 31 de marzo de 2011

Tertulianos


Una especie en franca expansión. Cada vez hay más y los mejores o peores –según se mire-, dedican su día de trabajo a ir pasando de un medio a otro, ametrallando sin pausa con sus opiniones o recomendaciones para la buena marcha del país o, ¿por qué no?, del mundo. Gracias por estar ahí.

Una serie de notas los definen:

Saben. No importa el debate, no importa la pregunta, la cuestión puede haber sobrevenido de forma súbita y tratarse de un tema de índole científica, económica, meteorológica, médica, política, cultural o sociológica. Tanto da. Prestos acometen la argumentación encaminada a la conclusión que, por otra parte y si ya conocemos al personaje, todos adivinábamos desde el inicio.

Supongo que sí, que a ratos resulta entretenido escuchar debatir sobre temas que captan nuestra atención o que aun teniendo el carácter de grandes temas del Estado, tocan de lleno nuestra esfera privada, temas de alta política que afectan a nuestras intereses personales o más íntimos. Suelo escucharlos en viajes largos, sobre todo de noche; es cuando sustituyo música por gente charlando –casi ni me importa el tema-, para combatir el sueño.

En los temas más actuales, en los temas de alta sensibilidad social, de los que todo el mundo habla, me asaltan las dudas, me cuesta decidirme, tengo que informarme para ser capaz de emitir una opinión sin reservas. El problema es que escucho opiniones o leo artículos procedentes de grupos mediáticos de diferente signo donde se me suministran datos y estadísticas brillantes por su supuesta incuestionabilidad y contundencia. La confusión llega cuando se me ofrecen cifras divergentes referentes al mismo asunto en algún vecindario próximo. ¿Son distintas formas de acercarnos a un problema o son simplemente mentiras? Por eso admiro o me admiro de la seguridad y suficiencia del tertuliano bregado. Sin términos medios, sin dudas. Los hay expertos en economía cuyas previsiones fallan a menudo pero que siempre tienen una razonada y detallada respuesta para la explicación del fenómeno a posteriori. Bien saben de un principio que domina cualquier político experimentado: la memoria del pueblo es débil.

Sabes de antemano cuál será su opinión sobre un tema. Conoces su ideología y partiendo de la misma, saben adaptarse con facilidad y confianza a cualquier cuestión, por espinosa o inaprehensible que sea. Tal vez hoy en día las zonas grises son más amplias que nunca. Cuando un partido “socialista” y “obrero” ejecuta, sin temblarle el pulso, política económica de derechas, cada vez se me hace más difícil comprender esa polarización que se transmite y alienta desde la gran mayoría de medios de opinión. ¿Existe la derecha e izquierda? ¿No cabe la tierra de nadie o las posiciones intercambiables? Excepto en temas sociales puntuales que resuenan mucho pero que no van más allá, donde sí se afilan las actitudes como si se quisieran marcar las diferencias para mostrar quiénes son los buenos y los malos –según el cristal con que se mire, claro-, se me hace difícil comprender la diferencia de muchas de las estrategias de nuestros dos grandes partidos. Por ello me asombro de la beligerancia de muchos de los participantes en las tertulias, lo que me hace dudar a menudo si es todo pose, un papel que les toca representar o verdaderamente se creen lo que dicen.

Tertulias las hay de diferente pelaje y condición, a cada paso más extremas o decantadas por una línea, lo que dificulta aún más hacerse una idea real o aproximada de lo que está ocurriendo. Escuchamos lo que queremos escuchar y por eso sintonizamos la cadena que nos ofrece lo que esperamos, la que dice las cosas claras, la que no miente, la independiente. Eso sí, hasta el dial más extremo, sea de uno u otro signo, debe mostrar apariencia de pluralidad y claro, nunca faltará el extravagante con ideas extrañas al grupo para que el oyente o espectador tenga aún más claro cuál es el camino correcto. Verdaderos generadores de opinión, gozan de amplio y extraño poder. Hace años dudaba si esta gente no estaría al servicio de colores, de partidos políticos; por entonces, todavía tierno, aún confiaba en valores como la independencia. Ahora no, ahora ya más cínico por edad, sé que toda la tropa tiene su sueldo –sea de una u otra forma- y su opinión está al servicio de unos intereses muy concretos y delimitados.

El mal se extiende y en lugar de pensar por ti mismo, aun reconociendo el carácter utópico de tal afirmación, podríamos morir en el intento tratando de buscar o entender qué está pasando realmente ahí fuera. Sin embargo, como balance final, me temo que todo se reduce a una amalgama de apuntes y medias verdades de las que debemos extraer el jugo que más nos convenga. He sido testigo de reuniones de familia –muy dadas al debate político, por cierto-, donde se reproducen bochornosos giros y expresiones literales de alguno de los tertulianos más conocidos. Es cuando me da por pensar en su perniciosa y creciente influencia, en que detrás de esa saturación de información, no hay más que manipulación. Realmente nos encontramos más desinformados y desamparados que nunca. De todas formas es lógico que las televisiones o las radios apuesten por una fórmula barata que les ocupa un amplio espacio y les garantiza una audiencia.

Los hay que se han convertido en verdaderas estrellas mediáticas y llevan un vertiginoso ritmo de apariciones en radio y televisión además de publicación de artículos y libros. Vida estresante y al límite ¿Para cuándo una serie sobre el cuerpo a semejanza de “policías”, “médicos” o “abogados”?

¿Recordáis lo triste que era la vida hace años cuando no se estilaba el formato, cuando el único debate del que teníamos noticia y que tal vez por eso, siempre era muy “mentao”, era el de Hermida sobre los toros, la mili o el feminismo?


"Cabezas parlantes" desde Nueva York.

10 comentarios:

El crusti dijo...

Amén. La maldita ideología. Hasta en el deporte. Yo, que duermo muy mal, suelo escuchar "punto y pelota" que es lo único que debería ser pasable de madrugada, que hablen de deporte a partir de las 2 de la madrugada en plenos insomnios o cuando el peque te depsierta y cuesta conciliar el sueño... Y es lo mismo pero en versión Barça y Madrid (izquierda y derecha, PP y Psoe, Protal y antital,...) y a grito pelao.

Podríamos hablar de las ideologías, en teoría la época de las ideologías murió; aunque creo que hoy en día solo existen ideologías: la falta de formación y de información nos matan. Sólo hay opinión y, al final, nuestras palabras siempre son las de otro pero hechas nuestras (generalizo, claro).

Eclectisimo, siempre.

Byrne, un genio. Y la canción Psycho Killer, a mi juicio, la más apropiada poner para este post. "Chacun, ses goûts"...

Una vez más, enhorabuena

Un abrazo

Santi

P.D. Bad news. No iré a Ciudad Rodrigo a la media. es el día de la madre y hay que estar con la suegra (si o si). Sin embargo este domingo estaré en una media de semimontaña en Castrocontrigo (León). Ánimo, valiente que son 23 kms... Asphalt is dead...

Redacció dijo...

Yo lo tengo claro. Como tú dices, la edad ayuda. Solía considerarme de Izquierdas, con el pueblo. Ahora me considero sólo Carlos, es lo único que tengo claro que es real. Para mí la política trata de una función, un gran teatro, como la caverna de Platón, como La Vida Es Sueño, nunca esas obras fueron tann actuales como ahora. Ya no voto, no entro en el juego. Ahora ya sabemos quien manda: el capital. Y éste no obedece a elecciones, ni a escrúpulos, ni a humanidad. Esta crisis ha sido una buena oportunidad para desenmascararlos a todos y la estamos dejando pasar, poco a poco, y tertúlia tras tertúlia.

Furacán dijo...

Vaya! pensé que hablabas de estos: http://muchachadanui.rtve.es/los-tertulianos-la-gasolina.html

Cada día la realidad supera a la ficción, vaya chollo eso de ser tertuliano, dices cualquier tontería y te quedas tan pancho.

vicesar dijo...

Estoy de acuerdo contigo en todo. Yo me considero bastante gris en muchos aspectos, ya que creo que ni todo es blanco ni todo es negro. Por un lado admiro los que tienen la seguridad y la fe ciega en su verdad. Pero por otro lado me dan miedo los que nunca tiene ninguna duda en sus creencias. Y los tertulianos, quizá por que es requisito imprescindible en su profesión, muestran una tremenda confianza en sus opiniones, que por otra parte suelen estar siempre orientadas en la misma dirección. Tan sólo conozco un periodista que me convence por su ecuanimidad; Fernando Onega.

Phaeton dijo...

Las cosas son como son. Unos, los buenos, tienen razón y otros, los malos no. Nada de medias tintas, las ideologías son muy importantes y necesariamente han de condicionar como vemos las cosas, cuando miras algo la ves de una forma pero si te pones a hacer el pino la verás justo al revés ¿Qué hay de extraño en eso? pues con las ideologías pasa lo mismo. Esto no es ningún relativismo, hay una forma correcta de andar, que es con los pies en el suelo.

Por tanto creo que es una generalización excesiva hablar de "Tertulianos", por no repetirme me remito a las rimera parte de mi comentario.

Atalanta dijo...

Crusti, gracias, me quedo con que la época de las ideologías pasó y mucho de lo que nos venden es gran camelo. Pensamos similar en muchos temas. Sobre todo me quedo con esa afirmación, "Eclecticismo, siempre". Byrne, palabras mayores. Bad, bad news. Una pena, tendremos que quedar en otra ocasión.

Txals, pues tú has descrito el desolador panorama reinante. ¿Cuántos como tú? Tal vez deberíamos votar en blanco. El poder político, representante de la soberanía popular -por otra parte trucada por un sistema electoral injusto y no representativo- cuenta poco. Hoy en día sólo cuenta el dinero.

Furacán, hombre, sobre todo hay que tener mucha labia y no dudar, solar un buen testamento a cualquier pregunta, aunque no manejes ni un puto dato fiable. Era un verdadero filón para la muchachada. Estuve a punto de hacer mención o enlazar algún vídeo. Tal vez alguno se vea retratado.

Vicesar, o nosotros somos muy raros o algunos de ellos muy "normales". También es el camino menos complicada, tirar por la vía más fácil y no plantearte demasiadas preguntas ni complicarte la vida. Yo soy así. Punto. Siempre hay alguno interesante o por lo menos alguna opinión interesante que puede hacer pensar.

Phaeton, no me digas que los de tu cuerda todo lo hacen bien y respecto a todos los temas adoptan las postura correcta. Anda chaaaaá... Impresentables los hay por todos lados. Si hay una "forma correcta de andar" ¿por qué hay tantas guerras internas dentro de los grupos con una misma ideología? En muchos temas, al final, no pesa más que la ambición por el poder.

Paco dijo...

Como diría mi amiga Eileen, dacuerjdo. Como está ahora de moda entre los chavales (para ti dagales, ¿no?), "ésto es de locos". Si uno demuestra que el otro miente, y éste hace lo propio con aquel...¿Quién coño dice la verdad?
¿Cómo pueden pensar que somos todos tontos? El problema, tú lo has dicho, es la falta de información, a todos los niveles.
Información histórica y actual. Tenemos la que los medios de comunicación nos ofrecen. Pero, al final, es el capital el que decide, porque es dueño de dichos medios. En este sentido, el sueño de los que iniciamos nuestras luchas allá por 1973, se acabó. Como señalaba El crusti, la época de las ideologías murió. Por edad y por estar cerca de las nuevas generaciones (lo siento por Whitman), por mi profesión, las esperanzas de que esta situación cambie sustancialmente son nulas.
Es duro, pero me temo que a corto plazo...
En fin, le debo unos treinta post
a David Byrne. Con los Talking Heads, en solitario y con sus colaboraciones. Genio y figura.
Un abrazo.

Savoy Truffle dijo...

Como comentaba hace poco con un amigo mio, lo de votar en blanco, vale es una señal de protesta, pero El Partido Político Blanco no va a gobernar. Eso es lo que han conseguido los dos grandes partidos que pueden gobernar, que se lo repartan todo entre ellos. Coincido con Txals, como no, manda el capital y esa es la verdadera ideología. La izquierda puede hacer cosas acordes a sus ideas, más o menos, mientras se lo permitan los mercados, y cuando se cierra el grifo como ahora, a hacer lo que manda el capital, es decir, política de derechas, que por otro lado reina en La Unión Europea. Esta crisis, en efecto ha sido una buena oportunidad para desenmascarar a muchos, pero encima los gobiernos de todo pelaje y condición le dieron dinero (ingentes cantidades) a los bancos, precisamente los únicos que con la crisis ya tenían beneficios, ¿porqué? Cuanto dinero tirado, que ahora hace falta.
En cuanto a los Tertulianos, dependiendo de a quien se oiga, el pais está bien ó pasa la crisis bien (mentira) ó esto es un desastre y nos vamos al garete (mentira también), es la misma lucha de los políticos llevada a la mesa de debate, a veces pienso que en esas mesas hay mucho político oculto, pero me entristece sobre manera como a esos tertulianos se les ve en demasía el plumero, y son teóricamente periodistas "objetivos".
Saludos.

Savoy Truffle dijo...

Por cierto, grandes los Talking heads... que con tanto tertuliano, se me olvida la música. Saludos.

P.D.: Don Paco, mala pinta tiene esto, y lo peor es que gente como tu que lucharon por la libertad, mire ahora la democracia basura que tenemos. Otro saludo.

Atalanta dijo...

Paco, cuando hablamos de estos temas me dejas un poco asustado porque si vosotros, que trabajáis con chavales, no veis algo de esperanza para mejorar en ciertas actitudes, apañados estamos. Me resisto a creer que todos los chavales sean como nos los presentan algún programa de TV, aunque tal vez sea un romántico. Ya escampará. Esperando ese post sobre los Heads.


Savoy, tú lo has dicho todo en el pedazo de comentario con el que no puedo estar más de acuerdo. Creo que entre todos hemos presentado un panorama muy alentador :). Tal vez las cosas cambien poquito a poco. Pequeñas señales hay. Lo alucinante es que aún con la crisis, cuando publican las cifras de beneficios de los bancos son mastodónticas. Algo fallla.