martes, 2 de septiembre de 2008

Pedro Salinas

Este mundo quizás necesite algo de poesía. Aunque me tachéis de pedante, de vez en cuando colocaré algún poema o letra de canción que me guste especialmente. Seguro que, como yo, alguien la disfruta.

El alma tenías
tan clara y abierta,
que yo nunca pude
entrarme en tu alma.
Busqué los atajos
angostos, los pasos
altos y difíciles…
A tu alma se iba
por caminos anchos.
Preparé alta escala
-soñaba altos muros
guardándote el alma-
pero el alma tuya
estaba sin guarda
de tapial ni cerca.
Te busqué la puerta
estrecha del alma,
pero no tenía,
de franca que era,
entradas tu alma.
¿En dónde empezaba?
¿Acababa, en dónde?
Me quedé por siempre
sentado en las vagas
lindes de tu alma.

Pedro Salinas. De “Presagios”.

2 comentarios:

Si te lo tengo que explicar... dijo...

Aún sin ser un gran aficionado, sí me confieso lector ocasional de algunos poetas que me "tocan" la fibra sensible: Benedetti,García Montero... Taluego!

Atalanta dijo...

Como yo, ocasional, ocasional. De vez en cuando lees alguno que te llama la atención y te dices... coño, qué guay, ¿no?

Ya pondré alguno de Benedetti que le gusta mucho a Elén, la administrativa que trabaja conmigo.